‘VAMOS A TENER UNA GRAN RELACIÓN’
Trump y Kim, líderes de EU y Corea del Norte, respectivamente, tienen cumbre histórica en Singapur.
SINGAPUR, SIN.- Ante la mirada atenta del mundo entero, el presidente estadounidense Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong-un se dieron un apretón de manos al inicio de su cumbre en Singapur, la primera de la historia entre mandatarios de ambos países y que busca la desnuclearización de Pyongyang.
Trump entró por la derecha y Kim por la izquierda a un patio del hotel Capella en la isla de Sentosa, en Singapur, y se saludaron sobre una alfombra roja y frente a una decena de banderas de Estados Unidos y Corea del Norte.
El presidente estadounidense dirigió unas pocas palabras al líder norcoreano y le tocó levemente el brazo derecho, mientras Kim le dijo en inglés: “encantado de conocerle señor presidente”.
Ambos posaron ante las cámaras con el rostro serio y no sonrieron hasta justo antes de entrar en la sala donde mantuvieron su primer encuentro.
Después de una conversación a solas que duró unos 48 minutos, Trump y Kim salieron de la sala de su reunión y se dirigieron a otra para mantener una reunión de trabajo bilateral con una delegación más amplia.
Trump dijo a los periodistas que el encuentro a solas había ido “muy, muy bien”, y el líder norcoreano no respondió a la pregunta de si está dispuesto a deshacerse de sus armas nucleares.
Por su parte, Kim comentó al inicio del encuentro con las delegaciones que agradecía poder estar ahí para “hablar de temas importantes” y prometió que colaborará con Trump, quien aseguró: “Vamos a trabajar para resolver los problemas juntos”.
En el segundo encuentro con las delegaciones de ambos países participan también el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, que se ha reunido dos veces con Kim en Pyongyang; y el jefe de gabinete de la Casa Blanca, John Kelly. También estaba el asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, cuyas declaraciones sobre la cumbre irritaron profundamente a Corea del Norte el mes pasado.
Mientras que en el equipo norcoreano estaba Kim Yong-chol, una de las figuras de más peso del régimen en cuanto a relaciones exteriores y espionaje. También Ri Yong-ho, canciller norcoreano, y Ri Su-yong, excanciller y otra figura considerada muy cercana al líder norcoreano ya que fue embajador en Suiza cuando Kim estudió en su niñez en el país alpino.
La reunión, cuyo objetivo es tratar la posible desnuclearización de Pyongyang, es la primera entre mandatarios de ambos países tras casi 70 años de confrontación a raíz de la Guerra Corea (1950-1953), y 25 de negociaciones fallidas.
Corea del Sur jugó un papel importante en acercar a los mandatarios de ambos países y de mediar para que se realizara la cumbre.
La cumbre estuvo a punto de cancelarse tras unas declaraciones de un funcionario norcoreano, Trump mandó una carta a Kim cancelando el encuentro y advirtiéndole: “Tú hablas de tus capacidades nucleares, pero las nuestras son tan masivas que ruego a Dios que nunca tengamos que usarlas”.
Vamos a trabajar para resolver los problemas juntos”. Kim Jong-un, Presidente de Corea del Norte.
Me uno a todo el mundo al desear que la cumbre sea un éxito a la hora de concedernos la total desnuclearización y la paz”. Moon Jae-in, Presidente de Corea del Sur.