‘FRENARÍA’, FALTA DE AGUA, A LA REGIÓN
Tan sólo en 2016, el SIMAS se llevó casi 25 mdp en utilidades, pero no invierte en comprar acciones de Agsal como se había pleneado originalmente
El presidente de la Cámara de la Propiedad Inmobiliaria Coahuila Sureste (CAPI), Raúl José Garza de la Peña, indicó que la falta de agua puede detener el desarrollo de la región, por ello, cuestionó la falta de inversión en infraestructura.
Agregó que hoy en la ciudad ya no se tiene agua 24 horas como se tenía hace algunos años, se dan cortes parciales y servicio cada tercer día, en parte por el crecimiento poblacional, pero también por la falta de inversiones persiste casi el mismo caudal disponible.
Destacó que desgraciadamente se vive en una zona donde no se pueden construir presas y se depende totalmente de agua de pozos profundos; pero, cada vez se extrae a más profundidad porque la recarga es cada vez menor.
“Es muy importante que las autoridades empiecen a planear desde ahorita de dónde traerán más agua, porque ese tipo de obra no es de inversión pequeña sino fuerte, y el agua hasta donde tengo entendido, en esta región está al sur del municipio”, indicó.
Por otra parte, cuestionó que a pesar de las utilidades que ha generado la paramunicipal, no se avance en la compra de acciones a Aguas de Barcelona como se había establecido en un inicio, sobre todo porque el contrato entre el municipio y Agbar vencería en unos años más.
Recordó que el contrato de asociación data de 2001, año en que Aguas de Barcelona con 81 millones de pesos compró el 49% de acciones, y SIMAS, organismo que legalmente debe prestar el servicio, se quedó con el 51.
“Aunque el Municipio planteó que año con año compraría acciones de Aguas de Barcelona, hoy tiene sólo el 55%, eso es 4 puntos porcentuales más, pese a las utilidades”, dijo.
Destacó que a través de solicitudes de información que realizó a vía ICAI, conoce las utilidades generadas por Agsal de 2012 a 2016, nada más ese último año el SIMAS se llevó casi 25 mdp, pero no lo invierte en comprar acciones.
“Esas utilidades o dividendos que se le dieron al SIMAS, ellos deberían estar recomprando las acciones porque el convenio se termina en el 2026 y el problema va a ser que si tenemos el 55% de las acciones, el día que se quiera disolver la empresa (Agsal), si vale la empresa 500 mdp, con qué vas a pagar los 200 mdp y deberá renovar el contrato”, concluyó.