Vanguardia

QUIEN BUSCA EL PELIGRO PERECE EN ÉL

-

El Quijote I, 20 En la llamada aventura de los batanes, la cual causó mucho temor a Sancho Panza, don Quijote insiste en medio de la oscuridad de la noche que vayan ambos a averiguar la causa de lo que alcanzaban a oír, “unos golpes a compás, con un cierto crujir de hierros y cadenas, acompañado­s del furioso estruendo del agua, que pusieran pavor a cualquier otro corazón que no fuera el de don Quijote”.

En defensa de su posición, Sancho le alega así a su amo:

“Señor, yo no sé por qué quiere vuestra merced acometer esta tan temerosa aventura: ahora es de noche; aquí no nos ve nadie: bien podemos torcer el camino y desviarnos del peligro, aunque no bebamos en tres días, menos habrá quien nos note de cobardes, cuanto más que yo he oído predicar al cura de nuestro lugar, que vuestra merced bien conoce, que quien busca el peligro perece en él”.

Este refrán, así citado por Cervantes, pues el que en su tiempo se decía rezaba: “Quien el peligro ama en él acaba”, tiene su origen en el texto bíblico “quien ama el peligro, en él perecerá”, según se lee en el libro del Eclesiásti­co.

Sebastián de Horozo, contemporá­neo del autor de El Quijote, lo glosó así: Y el que por alcanzar fama/ a gran peligro se ofrece/ no coge sino derrama/ que quien el peligro ama/ en él acaba y fenece.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico