Blindan Nueva York
NUEVA YORK, EU.- A los pies del puente Brooklyn, en Nueva York, inició ayer el juicio más importante por narcotráfico contra el sinaloense Joaquín Guzmán, considerado como “extremadamente peligroso”, aunque la defensa lo presenta como un campesino de una zona rural muy pobre de México.
La comitiva del traslado del preso mexicano, vigilada por helicóptero, obligará a cortar el puente de Brooklyn dos veces al día.
En la Corte Federal se observaron agentes con armas largas y unidades caninas para custodiar el lugar y se ha colocado un segundo detector de metales frente a la sala del juez encargado del caso, Brian Cogan.
Guzmán se encuentra recluido en el ala más segura del Metropolitan Correctional Center, en Manhattan, una de las prisiones más seguras de Estados Unidos.
El capo es mantenido 23 horas en una celda de 18 metros cuadrados donde la luz nunca se apaga; siempre monitoreado. No tiene contacto con otros presos, ni con su esposa. Tiene prohibido salir al patio por su historial de fugas en cárceles de máxima seguridad de México.