EL RETO PARA MEJORAR
Si bien existen vías importantes que convergen en la zona metropolitana, hay otras que deben ser adecuadas a la realidad
Si hay un área de oportunidad para mejorar la competitividad de la Región Sureste, ésa es modernizar y ampliar su conectividad, principalmente en carreteras y el Aeropuerto Plan de Guadalupe.
No obstante que tiene importantes vías que convergen en la zona metropolitana de Saltillo, existen otras que deben ser adecuadas a la realidad actual.
La carretera 40 –mejor conocida como la libre a Monterrey– fue proyectada para ampliarse de dos a tres carriles por sentido, al menos en el tramo que va de los municipios de Saltillo y Ramos Arizpe a la capital de Nuevo León.
Sin embargo, dicha propuesta no prosperó ante el Gobierno Federal anterior, que finalmente decidió realizar una Asociación Público Privada (APP) para que una compañía diera mantenimiento a la carretera desde Saltillo hasta Tamaulipas.
Hasta ahora existe la duda si el contrato incluye su ampliación o solo la rehabilitación anual de la carpeta asfáltica y señalización, pese a que sectores empresariales de Saltillo y Monterrey han manifestado la urgencia de lo primero.
Lo anterior, principalmente porque la autopista Monterrey-saltillo, alternativa a la libre, debe cerrarse constantemente por bancos de niebla –sobre todo en invierno– debido a que fue construida en un punto alto de la sierra. Además, en periodo de lluvias también sufre deslaves que paralizan la circulación.
La geografía de la región es tal que incluso la libre debe ser clausurada en ocasiones por escasa visibilidad, y por los frecuentes accidentes en los que se ven involucrados vehículos de carga pesada.
Por todo ello, su ampliación es vista como una necesidad imperante por la iniciativa privada; sin embargo, en el Presupuesto de Egresos de la Federación de este año tampoco existen recursos destinados a su mejoramiento.