El peligroso primer millón de habitantes
Hoy Saltillo cumple años y, aunque es tiempo de
festeja, hay que pensar en el futuro. Con base en los Cinco Vectores Clave de Carlos Garrocho Rangel para el Consejo Nacional de Población (Conapo), los principales conflictos que la ciudad enfrentará en algunos años serán la falta de agua y el sistema de transporte debido al crecimiento poblacional.
De 1950 a la fecha, Saltillo elevó su población de 98 mil 603 personas (cifra a la que se acerca actualmente Ramos Arizpe) a 871 mil 203, es decir, aumentó 89 por ciento el número de habitantes.
La tasa promedio de crecimiento es de 2.4 por ciento, lo que indica que aproximadamente 21 mil 256 personas llegan anualmente a la ciudad; a ese ritmo, entre 2025 y 2026 la capital del estado sería el hogar de más de un millón de personas.
Saltillo estaría en la misma categoría que lugares como el Valle de México, Guadalajara, Monterrey, Puebla-tlaxcala, Toluca, Tijuana, León, Ciudad Juárez, Querétaro y San Luis Potosí.
MUCHO TRABAJO... POCA AGUA
Este crecimiento se adjudica a que Saltillo se encuentra dentro del top ten de las ciudades que más generan empleos, sin embargo, Garrocho Rangel advierte que también son lugares que enfrentarán alteraciones bajas de precipitación hasta 2030.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), las ciudades de más de un millón de habitantes presentan densidades promedio de 36 viviendas por hectárea (viv/ha), y según la Encuesta Nacional de Seguridad Urbana (ENSU 2018) del Inegi, el 96.89 por ciento de la población de Saltillo depende del servicio público como fuente del abastecimiento del agua entubada.
De acuerdo con el diagnóstico “La disponibilidad natural de agua en las cuencas de México”, de Verónica Bunge para Semarnat, el 33 por ciento de las cuencas hidrográficas registran una fuerte presión hídrica, es decir, tienen una explotación superior al 40 por ciento.
“Las cuencas del norte tienen una tasa de crecimiento poblacional más alta, por lo que es de esperarse que la presión hídrica en estas regiones será mayor en el futuro próximo, si no se toman las medidas correctivas correspondientes”, en esta lista se encuentra Saltillo, según indica el investigador Garrocho Rangel en el diagnóstico hecho para Conapo.
En este caso, y teniendo en cuenta la polémica suscitada por la explotación del Acuífero Saltillo Sur, el investigador recomienda seguir “el principio de precaución”, teorizado por Roberto Andorno.
“El principio de precaución supone situaciones en las que el gobernante debe ejercer la prudencia a fin de tomar decisiones sobre determinados productos o actividades de los que se sospecha, con un cierto fundamento, que son portadores de riesgo para la sociedad, pero sin que se tenga a la mano una prueba definitiva y contundente de tal riesgo.
“En tales supuestos, la autoridad debe hacer un esfuerzo de prudencia, es decir, de una adecuada apreciación de las circunstancias del caso, para lograr el equilibrio entre dos extremos: por un lado, el temor irracional ante lo novedoso por el sólo hecho de ser novedoso y, por el otro lado, una pasividad irresponsable ante prácticas o productos que pueden resultar gravemente nocivos para la salud pública o el medio ambiente”, publicó el autor en 2002.
Actualmente el problema ya es visible. La Encuesta Nacional de Seguridad Urbana (ENSU 2018) del Inegi registró que el 39.5 por ciento de la población se queja de fallas y fugas en el suministro de agua potable.
TRASLADOS MÁS LARGOS Y MÁS COSTOSOS
Entre las problemáticas más importantes que registra esta encuesta, que se derivan del crecimiento de la ciudad, figura también el servicio de transporte público, pues el 33.4 por ciento de los encuestados por el Inegi lo señalaron como deficiente.
Al respecto el Programa Nacional de Desarrollo Urbano 20142018 señala que “en promedio, el 15 por ciento de los hogares en zonas urbanas reporta que gasta aproximadamente entre 51 y 200 pesos diarios para trasladarse de su casa al trabajo.
En el Valle de México, el porcentaje de hogares que paga dicha cantidad aumenta a 16 por ciento y en las ciudades de más de un millón (aquí la importancia de que Saltillo llegue al millón de personas) de habitantes aumenta a 21 por ciento.
En cuanto al tiempo de traslado se refiere un 62 por ciento de los hogares encuestados reportan que la persona que más aporta al gasto familiar le toma entre 23 y 38 minutos llegar a su centro de trabajo.
Con lo anterior se puede decir que al llegar a 2026, cuando la ciudad tenga más de un millón de habitantes, diariamente los habitantes de la ciudad gastarán entre 60 y 242 pesos diarios para trasladarse a su trabajo.