LE CORREN COMADRES Y COMPADRES
CIENTOS DE RUNNERS LOCALES Y HASTA EXTRANJEROS SE DIERON CITA EN LA ZONA NORTE DE LA CIUDAD PARA LA CUARTA EDICIÓN DE ESTA CARRERA
La Hacienda Los Compadres Capital fue testigo de la salida de más de 700 corredores que se dieron cita en la carrera “Córrele Compadre”, misma que fue organizada por el mencionado restaurante, en sinergia con Chronosport y que fue todo un éxito.
En una ruta que pasó por el bulevar Luis Donaldo Colosio, Pedro Figueroa, Eulalio Gutiérrez, Musa de León, entre otros, en punto de las 6:30 de la mañana los runners saltillenses se dieron cita a las afueras del negocio de comida tradicional mexicana para calentar y prepararse para un verdadero reto.
En diversas categorías, con distancias de 5 y 10 kilómetros, se dio el silbatazo de salida a las 7 de la mañana, comenzando los corredores a dejar su huella en las calles de dicho recorrido, en un clima agradable que si bien se manifestó con algunos intensos rayos del Sol, estos no mermaron el accionar de la competencia.
Mientras que los competidores de la 5K rodearon el área de la zona Norte de Saltillo, en los puntos establecidos por los organizadores de dicha carrera, quienes decidieron afrontar el reto de los 10K, tuvieron que llegar hasta el área cercana a Plaza Patio, para después retomar las cercanías del restaurante Hacienda Los Compadres.
Conforme pasaban las horas, el solecito hacía resentir a los corredores que ya cruzaban los últimos kilómetros de la decena que decidieron recorrer, mermando un poco la condición física del trayecto, sin embargo, los ánimos nunca bajaron para aquellos que se dieron cita en una ruta agradable.
Como dato curioso, en los primeros dos kilómetros de la carrera, justo en el semáforo de Musa de León y Moctezuma, un grupo de mariachis se encontraba alentando a los competidores, levantándoles el ánimo para que no claudicaran en su andar.
Para los del 5K tras más de media hora de camino, y para los 10K, de tal vez una hora y medio, todos fueron cruzando la meta con la cabeza despejada de haber logrado el objetivo, los pies y el cuerpo cansado, tal vez sí, pero con la satisfacción de colgarse una medalla más, o la primera, y la felicidad de empezar un domingo sintiéndose ganadores.