UNA SENSACIÓN inconfundible
EL LUJO DEL HOGAR Y LOS RINCONES MÁS EXQUISITOS DEL MUNDO SE HILVANA CON FRETTE, UNA MARCA CAPAZ DE LLEVAR LA MODA A LA INTIMIDAD DE NUESTRAS RECÁMARAS Y EXTERIORIZARLA EN CREACIONES QUE MUESTRAN QUE LA MAJESTUOSIDAD ES TANGIBLE
Herencia que se gesta desde 1860, es una de las referencias de Frette, una marca de lujo con sedes en Monza y Milán. Esta casa sigue la tradición de los grandes couturiers italianos al bordar sus atavíos con las mejores fibras que hay en el mundo, lo que los ha reiterado por generaciones, como los favoritos de aquellos que saben que es posible dormir sobre el máximo lujo. Quien conoce Frette, tiene como referencia ser un conocedor de la buona vita gracias a sábanas y ornamentos que se encuentran en la cadena hotelera The Peninsula, las camas de familias reales de Europa, el altar de la Basílica de San Pedro en el Vaticano o el dining car del Expresso de Oriente.
¿Qué distingue a Frette del resto? Opera en más de 100 exclusivas boutiques alrededor del mundo y desde hace diez años es una referencia del lujo en México, gracias a la exquisita labor —digna de una de las capitales de la moda— que hay detrás de cada uno de sus diseños y la selección de sus suaves hilos, escogidos cuidadosamente para satisfacer a los clientes más ilustrados, así como aquellos conscientes de que el verdadero descanso no posee precio alguno. Propios y extraños se enamoran de Frette al primer contacto con la piel, porque sus creaciones son una historia de amor que empieza en la recámara y termina donde nosotros lo deseemos.
Desde hace diez años, Frette es una de las más grandes referencias del lujo en México
Entre hilos todo se conoce mejor, todo se borda para crear algo nuevo; sus uniones construyen tendencias y moda que se puede distribuir en distintas y maravillosas presentaciones, que si bien se ven en grandes pasarelas, también se aprecia en el interiorismo gracias a Frette, en el que se adaptan a las nuevas aficiones sin olvidar de donde vienen. Frette permite dar un nuevo giro a las atmósferas que los rodean con texturas y bordados que se pueden esparcir sobre un comedor para impregnarle magníficos detalles, cojines que adornan todo tipo de sillones, toallas que nos envuelven con su suavidad y demás ornamentos capaces de crear múltiples escenarios con solo poner su particularidad en el interior. Desde hace más de 150 años, los filamentos de Frette se han bordado a la par de cientos de historias gracias a su perfecta manufactura, una que si bien abraza su herencia, emplea la innovación gracias al uso de la última tecnología disponible en colaboración con artesanos, pintores y artistas que definen cada detalle que vemos en sus creaciones. Alrededor del mundo, muchos saben perfectamente que la verdadera diferencia entre cerrar los ojos y descansar, se encuentra bordada entre cada uno de los hilos de las colecciones de Frette.