LIBROS, América está en venta,
All-American Ads of the 90s nos lleva a un recorrido por los resortes y más efectivas CREACIONES publicitarias de una de las décadas más revolucionarias y agresivas en la historia de la PUBLICIDAD en Norteamérica. Pero, más que todo, es un ejercicio para entender cómo se mueve el presente con otros medios y mensajes
Siempre ha habido alguien empeñado en hacernos comprar algo que no teníamos planificado llevar a casa. No crean que la efectividad de la promoción de ventas es algo que ha tenido su mejor momento en este milenio con todos sus nuevos artilugios y vías invasivas de manejar el mercado. Para nada. Se afirma que un papiro con 3000 años de senectud demuestra que en aquellos remotos días se hacía una rudimentaria publicidad en papiros. Otros insisten en que todo arrancó en la Grecia Clásica, junto a la actividad comercial y aquellos primeros comerciantes que tenían una vida nómada. Por simple intuición y sin nada semejante a una estrategia elaborada, los vendedores al llegar a poblado pregonaban a viva voz las bondades de sus mercancías.
Démosle a los historiadores y eruditos el beneficio de la duda que les abroga su noble oficio, pero nadie pone en tela de juicio que el siglo XX vio el más intenso y abarcador desarrollo en el mundo de incentivar el consumo. De hecho, la década de 1990 fue capaz de homogeneizar el foco de atención de generaciones tan disímiles como la X y los llamados babyboomers, con recursos que abarcaron desde anuncios cargados de erotismo y mitomanía, hasta los entonces revolucionarios reclamos audiovisuales irónicos, frescos y clásicos.
All-American Ads of the 90s, firmado por Steven Heller — copresidente de la School of Visual Arts MFA Designer y responsable del programa de autores—, y editado para Taschen por su editor ejecutivo Jim Heimann, presenta un compendio de los hechos más impactantes de una década y la manera en que se reflejaron y anticiparon en el complicado universo de los signos sociológicos. La masacre en Columbine, la presidencia de Bill Clinton en nuevo poder entronizado en Silicon Valley, la desnudez y el sexo ocupaban las páginas de las revistas para vender de todo, las Super Soakers, el Game Boy y las PlayStation; las nuevas drogas aletargantes para la juventud con nombres como Super Mario World y Sonic, la obsesión por los monogramas y el selecto abrevadero de marcas aludiendo a la necesidad inexplicable de mostrar símbolos de estatus. Todo eso y mucho más se engasta en los seis capítulos del libro de Heller, como compendio de grandes hitos de la mercadotecnia noventera. Cada página, puede darnos las claves para entender cómo se orquesta hasta hoy una campaña. Además del valor documental, el volumen tiene esa virtud de generar para los no estadounidenses un ejercicio de adecuación a su realidad y, también, nos puede llevar a otra dimensión de análisis sobre la década en la que se hizo ineludible la globalización.