Pide sacerdote ‘invertirle’ a la familia
La falta de la cultura del encuentro pone en riesgo de traer consecuencias catastróficas en las familias, dijo el padre Paulo Alfonso Sánchez Valencia, párroco de la Iglesia Verbo Encarnado, que invitó a la sociedad a no cansarse de invertirle a la familia.
“Ahorita estamos en un proyecto como iglesia, en el que nuestra preocupación y sobre todo los obispos estamos en lo que llamamos la cultura del encuentro”, dijo.
Informó que fue a partir de una reunión que tuvieron los obispos que están analizando los temas que están desintegrando las familias y los valores dentro del hogar.
“Al final los valores están, la manera es cómo los están viviendo y cómo los están queriendo llevar y esto de la (falta de la) cultura del encuentro que ha hecho que estando tan cerca al mismo tiempo estemos tan lejos”, dijo.
Mencionó que el pasado domingo, Día de la Familia, predicaba que “Vamos a visitar a la abuela y no es cierto, cada muchacho está con su celular, si vamos a salir como familia, lo primero que preguntan es ¿hay wifi?, ¿hay acceso a internet?, ¿hay señal?, ya no hay esa convivencia tan profunda como anteriormente estaba”.
Dijo que no es malo el uso de las redes sociales.
“De hecho hoy el Papa habla de los nuevos misioneros evangelizadores a través de las redes sociales pero de un recto uso”, dijo.
Sin embargo, el mal uso de las redes lo que provoca es la falta de la cultura del encuentro.
“De que estamos cerca pero al mismo tiempo estamos lejos, ya no hay esa manera de hablar, dialogar, la familia ya no se vuelve ese centro lógico, es que va a ocasionar problemas en el hogar, la manera de cada quien buscar sus espacios, sus maneras, de querer vivir su vida y eso va a traer consecuencias catastróficas en la familia”, advirtió.
Por ello hizo una serie de recomendaciones para las familias, para los padres.
“No te canses de estar queriendo encontrarte con tus hijos, hay que abrir espacios en los que esta cultura del encuentro no se pierda, de buscar, encontrar, participar, porque a veces hemos perdido el interés ante la negativa los padres se conforman: si no quieren salir, no salimos; si no quieren dialogar, no dialogamos y cada quien se encierra y al final no hay esa cultura del encuentro y eso está provocando el desorden”, advirtió.