Sufren por guerra millones de niños
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha alertado este lunes de que millones de niños “siguen estando en el filo de la navaja” tras un año de “guerra espantosa” entre el Ejército de Sudán y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), que ha dejado a cerca de 8.9 millones de niños en situación de inseguridad alimentaria agua, incluidos 4.9 millones en niveles de emergencia.
“Después de 365 días de conflicto, los niños y las niñas de Sudán siguen estando en el filo de la navaja de una guerra espantosa. Sin una acción concertada urgente y recursos adicionales, el país se arriesga a una catástrofe generacional que tendrá graves consecuencias para el país, la región y más allá”, ha dicho el director ejecutivo adjunto de UNICEF, Ted Chaiban.
“Si no se toman medidas inmediatas para detener la violencia, facilitar el acceso humanitario y proporcionar ayuda vital a quienes la necesitan, es probable que una catástrofe aún peor afecte a los niños durante muchos años”, ha advertido. En estos momentos se calcula que casi cuatro millones de niños menores de cinco años sufrirán desnutrición aguda este año, de los cuales 730 mil padecerán desnutrición aguda grave, potencialmente mortal.
A ello se suma que Sudán sufre una de las peores crisis educativas del mundo, con más del 90 por ciento de los 19 millones de niños en edad escolar del país sin acceso a la educación formal, y que durante los últimos meses ha aumentado el riesgo de una hambruna en el país africano, sin que por ahora haya visos de que las partes en conflicto estén cerca de alcanzar un acuerdo de paz.
“Esta guerra brutal y la posible hambruna están creando un entorno preocupante para una pérdida catastrófica de vidas infantiles”, ha manifestado Chaiban, quien ha incidido en que “casi la mitad de los niños que sufren desnutrición aguda grave se encuentran en zonas de difícil acceso, donde hay combates constantes, lo que hace que sus condiciones sean aún más terribles”.
“Todo esto es evitable, y podemos salvar vidas si todas las partes en conflicto nos permiten acceder a las comunidades que lo necesitan y cumplir nuestro mandato humanitario, sin politizar la ayuda”, ha recalcado, ante las numerosas restricciones a los trabajos de agencias humanitarias y organizaciones no gubernamentales a causa de los combates y las trabas impuestas por las partes en conflicto.