DE OPCIONES
Además de formar parte del listado de los Pueblos Mágicos de la Sectur, este paradisíaco rincón de Baja California Sur presume palmares y los cañaverales del Valle del Pilar; de hecho, un tiempo destacó por el cultivo de la caña de azúcar. Al pasear por sus calles se ven galerías de artes, la Misión de Santa Rosa de Todos Santos –fundada por los Jesuitas en 1720– y estadías como el Hotel California que, cuenta la leyenda, inspiró a la canción homónima de la agrupación Eagles. Otros imperdibles son el Hotel Boutique Guaycura y el Faro Beach Club & Spa. Además, la Bahía de Todos Santos atrae a surfistas de todo el mundo.
Ubicada a unos 45 minutos de Nuevo Vallarta, en la Riviera Nayarit, Sayulita es un Pueblo Mágico bañado por el Pacífico y repleto de atractivos que le dan un toque bohemio y chic. Su costa ofrece olas perfectas para adentrarse en el mundo del surf. Quienes no gustan de la adrenalina suelen tomar un masaje o probar delicias mientras hunden los pies en la arena tibia. El destino es el consentido de parejas de enamorados y de grupos de amigos que van en plan mochilero. Y sus hoteles, por lo general boutiques, están llenos de encanto. Al atardecer, hay que pasear por el quiosco y comprar artesanías que venden los huicholes.
Famoso por sus playas, la amplia variedad de deportes acuáticos y una activa vida nocturna, Puerto Vallarta es un destino idóneo para cualquier plan, ya sea un viaje familiar, de amigos o una travesía solitaria para alejarse del estrés. Pasear por su centro histórico, admirar las esculturas del Malecón, probar delicias en sus restaurantes o ver caer el sol son algunas de las actividades que los visitantes pueden hacer. Además de gozar de la belleza de sus playas, abrazadas por la Sierra Madre, Puerto Vallarta es ideal para la pesca deportiva y, por si no bastara, este rincón de Jalisco es uno de los más atractivos para el turismo LGBTQ+.
Con su acogedor ambiente, vibrante vida nocturna y atractivas playas, Puerto Escondido, en Oaxaca, es un paraíso tanto para los experimentados surfistas como para los amateurs. Los más adiestrados se dan cita en Playa Zicatela, mientras que Playa Carrizalillo es ideal para tomar clases con pacientes instructores. Esta zona de Oaxaca también resulta atractiva para quienes buscan escapar de grandes hoteles y prefieren hospedarse en espacios más íntimos, como estadías con aire boho-chic, así como hoteles boutique con interesante arquitectura y gastronomía.
Esta isla bañada por el Caribe mexicano es rica en historia, vestigios mayas y maravillas naturales. Considerada como un edén en la tierra es consentida de quienes gustan practicar turismo de aventura, gastronómico o de romance. Ubicada frente a las costas de Playa del Carmen, antaño fue conocida como Kuzamil que significa “la isla de las golondrinas” en maya. Aquí no sólo llegan cruceristas, sino también buzos ya que el destino es considerado como uno de los mejores del mundo para esta práctica. Además, los visitantes también pueden adentrarse en la jungla maya y visitar el sitio arqueológico de San Gervasio.
Lo mismo es un pueblo de pescadores donde el día transcurre en calma bajo una palapa con buena comida del mar que uno que acoge a cruceristas ansiosos por ver la belleza del Caribe Mexicano. Para gozar de sus bondades, vale la pena iniciar el día corriendo por su malecón y luego tomar un reconfortante desayuno. Más tarde es posible practicar paddle board o relajarse en familia. Esta población del sur de Quintana Roo también invita a bucear, debido a que el Banco Chinchorro pertenece a la cadena de arrecifes más grande de México y está a 30 kilómetros de la costa por vía marítima.
Las playas del Caribe mexicano son auténticos paraísos de arena blanca bañados por cálidas aguas de color azul turquesa, pero Playa del Carmen puede presumir, además, contar con un ambiente cosmopolita. Es considerada como el corazón de la Riviera Maya y su principal arteria es la Quinta Avenida. Esta calle peatonal está flanqueada por boutiques, galerías de arte, pequeños hoteles, restaurantes y bares con música en vivo. Un obligado a visitar es el Parque Fundadores, donde está el Portal Maya, escultura que tiene como fondo el mar y que muchos aprovechan para tomarse la foto del recuerdo.
El que fue un destacado puerto marítimo para comerciantes mayas, hoy es uno de los destinos más deseados por los lunamieleros y por viajeros que desean darle la vuelta al estrés, conectarse con la naturaleza y practicar el turismo de bienestar. Al tiempo que resguarda un importante sitio arqueológico, Tulum atrae con sus bellas playas. En este destino destacan también “El Pueblo” (El Centro) y la zona hotelera, esta última se divide a su vez en norte y sur. A Tulum se llega para tomar un tratamiento holístico, comer rico y descansar en glampings,
y hoteles boutique que ponen el acento en la sustentabilidad.