Volverá Leonora Carrington a su hogar en la Roma
Antes de que la pintora surrealista Leonora Carrington falleciera, su hijo menor, Pablo Weisz, pidió que le dejara su casa de la colonia Roma en la Ciudad de México para convertirla en un museo dedicado a ella.
“¿Quién va a querer venir a ver mi casa? A nadie le va a interesar”, le respondió entonces la artista británica radicada en México desde 1942 hasta su muerte, en 2011.
Hoy, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) apuesta a que el hogar que habitara la familia Weisz Carrington por más de 60 años, sea no
solo un nuevo atractivo turístico cultural, sino un centro de estudio del cual puedan surgir diversas investigaciones.
“Ese es nuestro gran objetivo: que no sea un espacio cultural, que no sea un museo, sino un centro académico cultural”, definió este martes Francisco
Mata Rosas, coordinador general de Difusión Cultural de la UAM, al ofrecer un recorrido a través de la nueva Casa Estudio Leonora Carrington.
Tras tres años de trabajos de rehabilitación y reforzamiento estructural, el inmueble ha sido modernizado y adaptado para ser recorrido por grupos peque
ños, al mismo tiempo que preserva de la manera más fiel posible –gracias a un trabajo de investigación y a los propios testimonios de Weisz– la disposición original de los variopintos enseres.
“Más que nada, la labor fue regresar la casa a un momento de esplendor, como Leonora vivió el espacio a su gusto”, destacó Alejandra Osorio Olave, directora académica y cultural de la UAM, responsable del proyecto.
Que van desde la mesa de madera en el comedor –donde Pedro Friedeberg tallara Leonora + Chiki (Chiki Weisz, el fotógrafo húngaro con quien
Carrington conformara una familia)– y el mueble tapizado de postits con números de teléfono, hasta el calendario en la habitación de la pintora, donde su asistente marcó una especie de bitácora de sus últimos días.
Suman más de 8 mil 600 objetos catalogados, entre los numerosos libros, muebles, ropa, fotografías, obras de arte, algunos de los cuales habían sido expuestos en Leonora Íntima: Memorias y Retratos.