¡Somos PRIMOR!

Para nadie es un secreto la alianza de facto entre PRI y Morena en varios de los temas importantes a nivel nacional, y por supuesto en Coahuila y Torreón no hay excepción a la regla. Esto tiene una explicación: si revisamos el ADN morenista, podemos dar cuenta de que este partido es el producto de la cruza de una raza PRInosauria con figuras que simplemente aprovecharon el “momentum” para brincar de la noche a la mañana a la mal lograda 4T. Una capirotada. Evidentemente, esta cruza dio nacimiento a un movimiento sin esencia propia, sin principios, sin ideas, pero con mucho pragmatismo.

¡Ah! pero el discurso de la 4T nos dice otra cosa. Mientras en la “praxis” se nota un romance entre PRI y Morena, en el discurso -cual pareja infiel-, los MORENOS niegan rotundamente los hechos; y acusan -con indignación- la existencia de una mafia del poder denominada PRIAN. Y es que en una y otra ocasión, desde el Presidente hasta sus más fervientes “fans” han denunciado “la existencia” de un “complot” perpetrado por esta “mafia” que obstaculiza acuerdos, que critica sin sentido, que desestabiliza y que confabula junto a los árbitros electorales “pérdidas de candidaturas”.

No nos vayamos tan lejos, tan solo en el presente proceso electoral, ¿cuántas veces no hemos escuchado a los candidatos de Morena pronunciar más la palabra PRIAN que incluso alguna propuesta contundente y clara? Y es que tan falso ha sido el discurso, que en Torreón, en la pasada sesión de Cabildo del H. Ayuntamiento, PRI y Morena unieron fuerzas para ganar una votación. ¿Pues qué el PRI no representa lo peor de nuestro país y de Coahuila? Esa pregunta se la tendríamos que hacer a los representantes de Morena en Coahuila y Torreón, que por lo visto, tan no levantan en las encuestas, que tuvieron que unir fuerzas con la “mafia del poder”.

Así pues, el proceso electoral sigue su curso y la desesperación ha producido -en algunos- quemar las naves, juntarse con sus peores enemigos y consolidar hacia la opinión pública, que en México, en Coahuila y Torreón ha existido, existe y existirá una alianza de facto entre PRI y Morena, porque lo traen en la sangre, porque son lo mismo y porque solo buscan el beneficio personal. Por eso, desde ahora en Torreón, se escucha al unísono: ¡Somos PRIMOR!