Crímenes despiadados, cometidos contra mujeres
LAS MUERTES DE ESTAS DAMAS FUERON DESPIADADAS Y MARCARON A LA POBLACIÓN.
¿Les suena el nombre de Karen Velásquez? Ella murió en el mes mayo de 2020, tras estar un mes hospitalizada, luego que su exmarido le tirara gasolina y le prendiera fuego.
Conrado Clean Bennett, de 42 años, expareja de Karen, llegó a su residencia el 9 de abril de 2020, con la excusa que le había llevado unos víveres para sus hijas.
La mujer sin ningún tipo de malicia, se subió al auto de su ex, pero este hombre tenía otros planes malvados, para con ella.
Conrado le echó gasolina encima a Karen y al auto y sin pensarlo dos veces le prendió fuego.
Karen estaba encerrada dentro.
Los vecinos escucharon sus gritos y salieron a socorrerla. Lograron sacarla del vehículo, pero la mujer tenía quemaduras muy severas. Fueron los propios vecinos quienes retuvieron al agresor hasta que llegaron las autoridades.
Esta mujer luchó por su vida, sin embargo, un mes después murió y dejó tres hijas en la orfandad. Conrado se mantiene preso a espera del juicio.
Uno de los crímenes más sádicos cometidos este 2020 en perjuicio de una mujer fue el de la educadora Marcel De León, quien murió en manos de su propia hija
Lian Argelis Joseph De León.
Fue la tarde del 19 de mayo, cuando se hizo el descubrimiento del horrendo crimen, pues el olor a podrido que emanaba del apartamento 4C, del piso 4 del PH Parque del Este, mantenía incómodos a los demás inquilinos.
Y es que Lian había asesinado a su mamá, pero no huyó, se quedó allí y descuartizó el cadáver de su madre, limpió y metió las extremidades en unas cajas plásticas, y continuó como si nada. A la fecha se mantiene detenida.
Betzaida Barrigón, de tan solo 26 años fue otra víctima de un hombre carcomido por los celos. Esta dama murió de seis puñaladas que le propinó su expareja. El hecho ocurrió en Nuevo México, corregimiento de Chilibre.
Se conoció que la víctima tenía 8 días de haberse separado de su agresor, y además tenía una orden de alejamiento que no sirvió de nada, pues su ex llegó hasta la residencia donde se encontraba y la atacó, luego de verla hablando con un hombre.
Mientras que el pasado 12 de diciembre unos niños presenciaron la trágica muerte de su mamá
en manos de su padre.
La víctima fue identificada como Mónica Cevera Palacios, de 26 años. Su pareja de nombre Rosendo Ábrego, de 42 años tras cometer el crimen se ahorcó en un árbol.
Este hombre la atacó con un machete, provocándole heridas
contundentes que acabaron con su vida en cuestión de minutos.
Brindan apoyo a familiares de las víctimas
“Una de las consecuencias que ha traído el resultado del aumento de feminicidios ha sido el confinamiento por el tema de la pandemia”, manifestó María Olmos del equipo técnico del Centro de Atención Integral a La Mujer (CINAMU) del Instituto Nacional de la Mujer.
Agregó que los casos de violencia doméstica se han desencadenado, han aumentado los índices, producto precisamente por el acercamiento por las medidas de restricción, de movilización, pues las víctimas conviven más con la pareja ofensora.
Por parte del Inamu informaron que han habilitado la línea 182, para que la mujer ante una situación de violencia pueda comunicarse y conocer las medidas que puede realizar y de una manera segura actuar.
Tienen abogadas disponibles las 24 horas para efectos de que puedan realizar las acciones necesarias para su protección.
También cuentan con la línea a través del Ministerio de Seguridad que es Crime Stoppers que una organización no gubernamental que permite las denuncias anónimas.
A los hijos de las víctimas en los casos de feminicidios el instituto brinda un equipo técnico especializado, para el acompañamiento en diversos ejes de atención, tanto en trabajo social, sicológico y el apoyo legal. “Si un hombre golpea a una mujer, en efecto estos son indicadores de que puede llegar asesinarla, por lo tanto, nosotros recomendamos valorar el riesgo, al momento que se dé un acto de agresión física. Nuestra recomendación es poner la denuncia y se le apliquen las medidas de protección”, sostuvo Olmos.
Explicó que si un niño ve el terrible acto extremo de agresión que un padre asesine a su madre, obviamente esto lo marcara para toda la vida, y requiere de atención inmediata sicológica para efectos de que vaya sanando ese hecho en su mente y de alguna manera poder reorganizarle su vida, pues ha visto el acto de agresión extrema.