Tanto lío que ni sé por donde empezar

Hay muchas cosas que van mal en Panamá y parece que hay pocas esperanzas que mejoren, ni un poquito, de hecho como sociedad estamos cada día peor, ni hablar de los funcionarios, de la empresa privada… la pandemia no nos ha hecho mejores, al contrario, somos peores seres humanos de lo que éramos hace un año.

Desde el dueño del restaurante que se queda con la propina del motorizado, el funcionario que pide coima para firmar un documento, el inquilino que está cobrado pero no paga el arriendo, escuelas que cobran gabinete sicológico y laboratorios que no dieron el el 2020 ni darán este año, fiestas, bodas y bar mitzvah no han parado, “ahora son más discretos”, por todos lados nos estamos portando mal.

Ni hablar del cambio del Plan de Ordenamiento Territorial (POT) 18 meses de trabajo reemplazados por un mamotreto irreconocible. El abandono de mascotas; podría entender que la crisis económca obligue a “dejar ir” al perro o al gato de la casa, pero dejar a un animalito amarardo o encerrado sin agua ni comida viendo como muere lentamente es de gente mala y perversa.

El caso de los albergues sabemos quedará en casi nada pues los arrestados, igual que en casos similares, serán los que no tienen plata ni palanca. La robadera de tierras, los robos en las residencias, los bancos matando a la gente a punta de llamadas de cobros.

Solo tenemos una oportunidad para cambiar y es ahora perodebe ser rápido porque ya muchos hemos empezado a extrañar la época de la dictadura.

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