Bases no, minas tampoco
Hace 4 días se conmemoró los 59 años de los eventos del 9 de enero de 1964. Por ellos se impuso como consigna aquello de que “los mártires hablaron claro, bases no”. Durante los años subsiguientes se abrió negociación de cómo salir del enclave colonial que representaba la Zona del Canal. Se llegó a un proyecto de tratado denominado Robles-Jhonson que fue rechazado pero la consigna de “Bases No” siguió rugiendo en las fibras íntimas de los patriotas.
Hoy Panamá enfrenta otra negociación determinante de su futuro. De hecho está un enclave empresarial minero que no tiene sustento legal porque la ley que lo amparaba fue declarada inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia a inicios de 1998.
Proporciones guardadas hay similitudes con la lucha generacional para erradicar aquel tratado que nos puso, de hecho, en una condición colonial. El contrato con Minera Panamá no tiene sustento paro la Minera, con la complicidad de los gobiernos desde 1997, han permitido que llegáramos a donde hoy estamos.
Se argumenta que la inversión minera, primero con
Petaquilla Gold, pasando hasta hoy a Minera Panamá, cuya propietaria es la empresa canadiense First Quantum, genera beneficios para Panamá. Igual se decía del enclave que administraba EUA, como si fuera soberano, el Canal.
Así como a raíz de 1964 se determinó que la administración y tutelaje gringo tenía que desmontarse, hoy, ante el hecho cumplido de la existencia de una empresa funcionando, hay que negociar su salida, porque para un territorio pequeño como Panamá, el daño ecológico que produce hoy, no hay tecnología para reducirlo a niveles tolerables. Pero de que hay que cerrarla, hay que cerrarla, diseñando un cronograma de reducir su actividad lo más pronto posible.
De la concesión madre que fue el contrato con Petaquilla Gold todavía queda, como un monumento a la insensatez, las tinas de relave de aquella explotación, con toda la contaminación continuada que ha generado y seguirá generando.
Hay que ir reconvirtiendo los puestos de empleo directo, en número de 5200 hoy, a trabajo en actividades cónsonas con nuestro ambiente.
Y a los funcionarios que han permitido esto, procesarlos penalmente, por haber sido cómplices, por acción u omisión, de la calamidad en que estamos.
Minas NO…