Desempolvan el torrijismo
Cada vez que el PRD va a elecciones, ya sean primarias o nacionales, salen voceros, de todas sus facciones, proclamando que son torrijistas.
La expresión empezó a usarse en los años 70 como necesidad propagandística para dar contenido, supuestamente ideológico, a lo que llamaron en sus inicios “proceso revolucionario”. En 1972 intentaron institucionalizar el mal hadado “proceso” con lo que llamaron el “poder popular” vestido de “representantes de corregimiento” que en número de 505 se reunieron en una Asamblea donde su primer acto fue aprobar una constitución, tan hecha a la medida del dictador, que el artículo 277 lo nombraba como “Jefe de Estado” dándole todos lo poderes políticos. Aberrante documento que no pocos ilustrados, buscando una cuota de poder, se plegaron ignominiosamente al dictador redactándolo y aplicándolo desde diferentes puestos que el dictador les concedió. Bolívar decía que la inteligencia sin probidad era un azote. Y tenía razón. Ya para ese momento iban varias centenas de muertos, desaparecidos, exiliados, encarcelados, torturados y estos cerebros de alquiler no tenían el menor empacho para maquillar la dictadura, apoyada por Estados Unidos.
En base a propaganda decían y engañaron a no pocos ilusos que creyeron que hay dictadores buenos. Tanto así que usaban el eufemismo de “dictadura con cariño”. Hasta lo vendieron como nacionalista aunque nos dejó “bajo el paraguas del Pentágono”.
Decían los nazis que “una mentira repetida mil veces se hace verdad”. La maquinaria propagandística de la dictadura engañó.
Ahora desempolvan el vendido torrijismo en sectores amplios de gente oportunistas unos e ingenuos otros para buscar aceptación entre los adocenados por la propaganda o por el interés de pelechar del poder. De estos últimos hay en todos los partidos que hacen mancuerna, con perredistas, politiqueros de todos los partidos para pelechar del poder.
Lo bueno de esto es lo malo que se está poniendo. Siento que si no degradamos más como sociedad no habrá reacción de indignados, ya no solo contra perredistas llamados torrijistas sino contra todos los inmorales de la política.
El torrijismo fue una mentira que puede, en estos tiempos, reducirse al mínimo porque habiendo gobernado Panamá más de 30 de los últimos 50 años, nos tiene ultra degradados política, social y económicamente. Si el torrijismo hubiera sido bueno no estaríamos tan mal…