Buscando a un guerrillero
La
Garza, periodista y revolucionario.
En Panamá también se han buscado a los desaparecidos, a muchos se han encontrado y se siguen buscando a otros muchos. Es un reclamo justo en cualquier país donde por diversas razones hay desaparecidos.
La solicitud del Gobierno mexicano y el apoyo del panameño para buscar los restos del periodista guerrillero que combatió la Dictadura de Porfirio Diaz, debe llamarnos a la reflexión para buscar a nuestros héroes perdidos y olvidados. Nosotros los tenemos y nadie hasta ahora, ni liberales conservadores ni revolucionarios se han preocupados por recoger esos pedazos de historia esparcidos en el suelo istmeño y en tierras americanas.
Nadie sabe a ciencia cierta cuántos panameños se embarcaron con el Batallón del Istmo en 1823 para combatir en Junin, Matará y Ayacucho en 1824, como tampoco sabemos sus nombres para lograr la Independencia del Perú y de la América del Sur. Tampoco sabemos cuántos murieron y cuántos regresaron. Interesante sería saber si los restos del General del Ejército Unido Libertador, José Domingo Espinar Aranda, nacido en el Barrio de Santa Ana, existen en el Cementerio de Arica, ayer peruano y hoy chileno. Si existieran, sería justo repatriado a nuestra Patria para honrarlo a él y por su honra a todos los panameños que dejaron el pellejo en Junin, Matará y en Ayacucho en 1824.
Levantar un Monumento a todos ellos para dignificar sus sacrificios en aquellas batallas memorables en este año cuando se conmemora el BICENTENARIO de esa epopeya Bolivariana.Ojalá los panameños de hoy, pasada las elecciones, nos podamos unir para rescatar el recuerdo de los caídos de Ayacucho, a los caídos de Bique, a los caídos de Río Chico, a los caídos del Puente de Calidonia y luego también hacerles el Memorial a los caídos del enero heroico de 1964.
La panameñidad necesita que rescatemos sus nombres, su heroicidad y su martirio. La juventud de estos tiempos y los viejos tambien, necesitamos inspirarnos para seguir teniendo esperanza en el Panamá Mejor y en el Nuevo Panamá que nos prometieron.