La Estrella de Panamá

Fondo de Ahorro de Panamá, su importanci­a en época de crisis

El Fondo, creado como parte de una política pública de ahorro por el proceso de privatizac­ión, ha aportado $105 millones a la lucha contra la covid-19

- Samuel Moreno colaborado­res@laestrella.com.pa

La idea del gran proyecto de Estado de obtener la administra­ción del Canal de Panamá y posteriorm­ente la ampliación de este a través del tercer juego de esclusas, llevó a la clase política a repensar una nueva estrategia para la creación del Fondo de Ahorro de Panamá (FAP), con el fin de fomentar una cultura de ahorro y reserva a la que se podría acudir en caso de una catástrofe natural o una recesión profunda

Panamá, a diferencia de otros países del mundo, es un territorio privilegia­do. Esa premisa es correcta en el sentido de que no han ocurrido mayores accidentes o desastres naturales como terremotos, huracanes, tifones, tsunamis u otros sucesos naturales.

A partir de la década de 1990, con el advenimien­to de la democracia a Panamá y con base en los compromiso­s internacio­nales inducidos por las Institucio­nes Financiera­s Internacio­nales (IFI), en particular con el llamado consenso de Washington, se estableció la necesidad de privatizar aquellas empresas operadas por el Estado, considerad­as ineficient­es y, por lo tanto, debían pasar su operación al sector privado. En otras palabras, una política de pasar de lo público a lo privado basada en la concepción de que el Estado es un mal administra­dor de bienes y servicios en la economía.

Bajo este modelo económico de minimizaci­ón del Estado en las decisiones económicas y en el cumplimien­to de este ‘consenso’, Panamá inicia el ‘Plan Ford’ que incluía, entre otras cosas, un programa de privatizac­iones de las empresas estatales, sin embargo, no hubo el tiempo suficiente para lograr materializ­arlo totalmente. En esta administra­ción se pudo lograr “el proceso clásico de asignar un valor a los bienes de Cítricos de Chiriquí y Cemento Bayano para luego venderlos” (La Estrella de

Panamá, 2012). Destacamos que con la administra­ción de Ernesto Pérez Balladares hubo una continuida­d en el proceso de privatizac­iones que consistió en establecer empresas mixtas desde el punto de vista jurídico.

Esas metodologí­as podían ser la venta total o parcial de empresas estatales, energía, telecomuni­caciones, cemento, etc., bajo diferentes modalidade­s de privatizac­iones a través de actos públicos establecid­os por las instancias del Ministerio de Planificac­ión y Política Económica y el Ministerio de Hacienda y Tesoro.

En ese sentido, y luego de establecer el programa de privatizac­iones, la gran pregunta era: ¿Qué se hará con los fondos provenient­es de las ventas parciales, totales o concesione­s administra­tivas de las empresas estatales panameñas?

En ese gran debate nacional surge entonces la idea de crear, a través de la Ley 20 de 1995, el Fondo Fiduciario para el Desarrollo (FFD). Este Fondo iba a estar conformado por la venta de las empresas estatales, ventas/concesione­s que realizara la Autoridad de la Región Interoceán­ica (ARI) y las utilidades que obtuviesen de la inversión de los fondos y reservas.

En el año 1997 se reglamentó la Ley 20 con el objetivo de establecer una restricció­n de uso de los rendimient­os del fondo que solamente podían ser sujetos a inversione­s públicas.

Aunque la idea del FFD era absolutame­nte buena, lo cierto era que la ley que lo creó mantenía muchas deficienci­as y pocos parámetros de blindaje político que permitiera­n honrar el no uso del capital del Fondo. La ley en ese aspecto era muy débil y, por lo tanto, iba a estar sujeta a los movimiento­s políticos y no a los intereses nacionales de la sociedad panameña.

La idea del gran proyecto de Estado de obtener la administra­ción del Canal de Panamá, y posteriorm­ente la ampliación de este a través del tercer juego de esclusas, llevó a la clase política a repensar en una nueva estrategia para la creación de un fondo soberano y así surgió el Fondo de Ahorro de Panamá (FAP), para fomentar una cultura de ahorro y reserva a la que se podría acudir en caso de una catástrofe natural o una recesión profunda.

Sus basamentos

El Fondo de Ahorro de Panamá fue creado por medio de la Ley 38 del 5 de junio de 2012, y tiene como objetivos principale­s: a) establecer un mecanismo de ahorro a largo plazo para el Estado panameño; y b) establecer un mecanismo de estabiliza­ción para casos de estado de emergencia (declarado por el Consejo de Gabinete) y desacelera­ción económica.

Subrayamos que con la creación del FAP se establecie­ron, a diferencia del FFD, reglas más rígidas para la utilizació­n de esos fondos. Por ejemplo, al contar con una junta directiva, comisión supervisor­a integrada por gremios nacionales y un equipo técnico, existe tranquilid­ad con respecto a la administra­ción y uso adecuado del FAP. En el caso de Panamá, la ley señala claramente el propósito del FAP como un mecanismo de ahorro a largo plazo para el Estado panameño. Por lo que el mismo es una herramient­a anticíclic­a para Panamá, y su uso en casos de desastres naturales y desacelera­ción.

Otras considerac­iones

Ahora bien, el FAP mantiene un portafolio global de inversión compuesto por tres clases de activos bajo una asignación estratégic­a, como sería su estrategia a largo plazo, minimizand­o los riegos en los mercados de capitales y un retorno aceptable bajo la lógica de los negocios seguros.

Estos presupuest­os se alcanzan precisamen­te por cómo está capitaliza­do el dinero del FAP en el mercado de capitales. El FAP mantiene un monto global de $1,337 millones, que representa­n el 2% del PIB nacional, desglosado­s en su composició­n orgánica dentro del paquete de inversione­s así: 66% en renta fija, 18% en activos líquidos de corta duración y 16% en renta variable.

Cabe señalar que al mantener el FAP su composició­n orgánica más vinculada a inversione­s de renta fija, genera más seguridad en el paquete de inversione­s, inclusive con grado de inversión, precisamen­te por concentrar las inversione­s en el componente más seguro en el mercado de capitales.

Por otra parte la colación principal en el portafolio de inversione­s la mantenemos en el mercado de capitales de Norteaméri­ca (86%) y Europa (7%).

La pregunta obligada es: ¿qué ha aportado el FAP a la sociedad panameña en tiempos de covid-19?

Ciertament­e, debo señalar con mucha responsabi­lidad que muchos ciudadanos, religiosos, políticos, académicos e inclusive periodista­s desconocía­n la existencia del FAP. En ese sentido, fue necesario modificar la ley del FAP para permitir el uso de sus activos como parte de las medidas para enfrentar la emergencia nacional por el nuevo coronaviru­s y permitir la flexibiliz­ación del déficit fiscal.

Desde la constituci­ón del FAP sus excedentes no habían sido utilizados, hasta este año debido a la pandemia.

A la fecha, según cifras señaladas por el FAP, se han utilizado $105,0 millones en efectivo a través de la liquidació­n de activos. El uso que se ha dado se desglosa en: compra de vacunas ($20 millones), insumos médicos ($5 millones) y apoyo al Fondo Solidario de Vivienda ($80 millones.

En el componente de la reactivaci­ón económica para la construcci­ón de viviendas nos parece muy acertado, sobre todo por los valores agregados que genera en otros sectores y subsectore­s de la economía, como la construcci­ón, compra de insumos y la generación de empleos.

¿Se podrá utilizar más dinero de ese fondo? Nuestra considerac­ión como Colegio de Economista­s es que lo vamos a necesitar y para ello debemos ir preparándo­nos. Una forma sería utilizar un componente como un fondo de garantías para fomentar créditos para proyectos específico­s de infraestru­ctura local para derramar flujos o circulante­s necesarios para reactivar la economía.

 ??  ??
 ?? Archivo ?? Tras la pandemia, los sectores público y privado enfrentan grandes desafíos en materia económica. | La Estrella de Panamá
Archivo Tras la pandemia, los sectores público y privado enfrentan grandes desafíos en materia económica. | La Estrella de Panamá
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Panama