Logística marítima y aérea, dos oportunidades sin explotar
La única manera de avanzar es quitándole tamaño al Estado... que es el administrador más ineficiente”,
GUILLERMO SAINT MALO EMPRESARIO
Para Guillermo Saint Malo, cabeza de Grupo Eleta, la falta de personal capaz en puestos clave juega en contra del desarrollo del país. "Tenemos todas las herramientas para aprovechar la logística aérea y marítima y estamos, pero no lo hacemos porque no están las personas capaces", dice
Es increíble la capacidad que tiene el panameño de reinventarse, ser resiliente y creativo en las cosas que ejecutamos todos los días. La cantidad de cosas que estamos haciendo en el tema de energía, bienes raíces y ‘wellness’, es 100% atribuible a la capacidad de las personas de reinventarse, hacer y crear”.
Para el CEO de Grupo Eleta aunque Panamá cuenta con normativas impositivas y fiscales muy atractivas para los ejecutivos internacionales, claves en la logística y la reactivación, se debe forjar la competitividad desde la coherencia entre lo que “predicamos y lo que somos”, desde el Estado
Guillermo Saint Malo Eleta lidera la tercera generación de la familia Eleta. Como CEO del grupo empresarial vinculado a la industria del café de especialidad, bienes y raíces, energía, agro y turismo, sostiene la estructura desde la que asegura impulsar proyectos que suman al propósito de alcanzar un desarrollo integral en Panamá. Durante la entrevista, no duda en lanzar dardos al Estado y sin reticencias confiesa que “Administración tras Administración hay muy poco nivel en las capacidades de los actores y las actrices que nos representan; en esa mala representación le estamos restando al país flexibilidad para reinventarse a la velocidad que el mundo lo requiera”. El empresario también reclama una mirada ciudadana más consciente hacia el entorno, donde el valor que otorgue el consumidor hacia los productos locales con calidad de exportación como el café, fruto de nuestro suelo, sirva de catalizador de la marca país, del turismo y de la economía.
En un escenario socioeconómico sin pandemia, ¿cuáles serían las mayores potencialidades de Panamá?
En pandemia o no, los fundamentos de la economía de Panamá son los mismos. Uno de los retos de otros países versus Panamá, es que se deben reinventar porque tienen unas economías dependientes de sectores que ya no serán tan efectivos como lo han sido en el pasado. Panamá tiene la suerte de que los fundamentos de su economía hacia adelante, son los mismos. Es un país que redistribuye productos, que administra la parte financiera de la región, que brinda servicios financieros, que tiene que incrementar su capacidad física instalada para procesar productos y reexportar, es un país ‘dolarificado’ que no tiene un problema de moneda, con una infraestructura relativamente buena que con poca inversión adicional será mejor, es un país que no tiene retos en el tema de generación de energía y en proveer energía a sus industrias, que tiene una buena normativa para proveer de energías renovables, que tiene un Canal que se está ampliando, con un aeropuerto que conecta con el resto del mundo, no solo para carga aérea sino para el individuo que gestiona una cartera internacional; hoy día un ejecutivo en Panamá puede gestionar cartera en Honduras, Nicaragua o El Salvador y tener a su familia en Panamá, de una manera económicamente más atractiva que en Florida. Panamá es un país que tiene normativas impositivas y fiscales muy atractivas para los ejecutivos internacionales. Lo que debemos hacer es quitarle importancia al Estado al solucionar problemas, cuando el Estado, es el problema.
Con un mercado tan golpeado, ¿qué tan importante es mantener la competitividad para atraer a la inversión extranjera?
La competitividad se proyecta en gran medida al ser realmente competitivos. Tenemos que ser lo que predicamos que somos. No podemos venderle al mundo que vengan a hacer turismo y que vayan a las ruinas de Panamá Viejo y no haya baños. La competitividad va con ser realmente competitivos. Creo que Panamá lo es en muchos aspectos, pero hay otros importantes en los cuales trabajar como la infraestructura de turismo; ahora mismo hay una ley nueva que impulsa esto, lo que es un gran paso que le dará la capacidad a Panamá de generar productos, es una gran oportunidad. En turismo construyes y queda un activo que genera mucho empleo sostenible y mucha construcción; muchos activos de turismo generan muchísimos empleos permanentes, unos directos y otros indirectos; es un gran paso para Panamá para generar empleos sostenibles en el tiempo. Y la competitividad también viene de la confianza del mundo en que el país tiene seguridad jurídica, capacidad de generar oportunidades, hay protección y un sistema que funciona.
¿Qué sectores serán determinantes para el proceso de reactivación económica?
Logística y valor agregado. Por ejemplo, hay muchísimas empresas en el continente americano que tienen una dependencia grande en Asia y hoy día se sienten inseguras; no significa que deban desconectarse de su capacidad productiva en Asia que es muy competitiva en precios, sin embargo, van a dejar de tener esa dependencia en Asia y tendrán una en América, en países como Panamá y México. Hay una oportunidad importante de que Panamá genere empleos nuevos en procesamiento de productos porque el costo de fletes desde El Canal y los aeropuertos es muy competitivo.
¿Cómo estimular la generación de emprendimientos innovadores para el desarrollo sostenible del país y la región?
Con ejemplos de más personas y que la banca tenga las herramientas para darle a los emprendedores. No es un tema de Estado ni de leyes; si de leyes se tratara, prohibamos la pobreza. Si le generamos productos a la banca privada para que apoye al emprendimiento, perfectamente serán catalizadores adecuados para hacerlo. Y en el emprendimiento hay un tema de riesgos y de entender lo que uno hace, el esfuerzo del individuo.
¿Cuál es la vía para lograr un Panamá desarrollado de manera integral (economía, cultura, institucionalidad)?
Lo que pasa es que el Estado juega un rol importante Yandira y estamos muy mal representados. Administración tras Administración hay muy poco nivel en las capacidades de los actores y las actrices que nos representan; en esa mala representación le estamos restando al país flexibilidad para reinventarse a la velocidad que el mundo lo requiera. Una de las grandes cosas que hemos aprendido, es que a diferencia de antes, donde un ingeniero iba a la universidad y aprendía toda la carrera para ser ingeniero, hoy día esa persona también aprende que se va a tener que reinventar cada cierto tiempo; es un tema de mindset, de cómo piensas. Si lo entiendes y educas a la gente, como sociedad vamos echando para adelante y la única manera de hacerlo, es quitándole tamaño al Estado y dándole más poder y herramientas al ciudadano a través de la empresa privada, de oenegés, de infraestructuras pero no engrandeciendo al Estado que es el animal más burocrático, el administrador más ineficiente, es el generador de los problemas para justificarse, perpetuarse, tener poder, las cosas que todos sabemos de corrupción. Mientras más chiquito sea el Estado y más herramientas tenga el individuo, mejor.
Nuestro café de especialidad, es uno de los mejores del mundo. ¿Cómo podría darse un mayor aprovechamiento a esta industria para fortalecer el músculo de este sector productivo?
No puede ser que Panamá produzca el mejor café del mundo y en Panamá, no me lo tome. Ahora te lo puedes tomar en Café Unido y en un par de lugares, pero no es común. En Francia, vas a cualquier sitio, casa o establecimiento y te tomas el mejor vino del mundo; no el más caro pero el adecuado según la época del año, según el clima, porque hay un entendimiento en el francés, con orgullo, de que tiene que darle al cliente un súper producto. Panamá hoy día produce y exporta el mejor café del mundo; nosotros invertimos en eso pero también quiero ir a todas las instituciones y oficinas del Estado y tomarme un súper café. El café además tiene esta súper oportunidad, de generar empleo y orgullo a Panamá.
¿Cómo se logra estimular ese consumo local y amor a lo propio, para afianzar la identidad a través de la valorización de nuestros productos?
Como lo estamos haciendo; hablando del tema, que lo vean en medios, con conversaciones mías, de Janson, de Peter, de Juan, Alberto y José. Que comiencen a hablar del tema, a hacer catas. Nosotros ahora mismo, por ejemplo, estamos haciendo cursos de baristas y ellos se están convirtiendo en los súper catalizadores y en lo que llamamos coffee evangelist o evangelistas del café. Pero no podemos predicar que tenemos el mejor café del mundo y tomar uno malo o no tomarnos el tiempo para entender del café. Es una gran oportunidad también para el turismo hacia adelante, que será experiencial: voy a Panamá, a la montaña, porque tienen el mejor café; lo pruebo, lo toco, veo cómo se procesa, y veo la mano de obra Ngäbe y que es una gran parte de la generación de valor en la cadena y aprendo del país, entiendo del tema y me enamoro de Panamá que no es solo una foto, sino que hay una experiencia importante, particular y única. Ese individuo que vino a Panamá, fue a Volcán, Renacimiento, Boquete, y probó este súper café en esta súper experiencia, el día de mañana cuando esté en Washington, Seattle, Beijing, París, y vea un café de Panamá, te apuesto a que lo compra y si tiene la capacidad de hacerlo online, lo hará.
El espaldarazo al turismo, por parte del sector gubernamental, ha sido siempre necesario. Hoy el desafío es mayor por la pandemia. ¿Cuál es el escenario que vislumbra para 2021?
Complicado todavía; las personas están con algo de miedo a viajar, porque la vacuna no está totalmente ejecutada. Hay retos. El viajero joven es menos miedoso porque porcentualmente impacta menos el virus. Es importante hacer productos para los jóvenes ya que es una manera de activar nuestra economía del turismo. Y debemos convertirnos, al igual que Costa Rica, en un país donde se promueva la conservación del medio ambiente, de una manera muy importante porque eso es lo que la gente quiere ver y en Panamá lo hemos hecho tan mal, que si empezamos a hacerlo un poquito mejor, la diferencia va a ser enorme. La próxima vez que vayas a San Blas, Las Perlas, Boquete y Volcán, y sean sitios divinamente limpios y protegidos te van a gustar más y te va a apetecer regresar, así que debemos ser lo que predicamos que somos.
Hay un diálogo nacional que se está llevando a cabo con la intención de poner sobre la mesa soluciones a las problemáticas que enfrenta Panamá. ¿Han elevado propuestas desde Grupo Eleta?
Hemos llevado 38 versiones del Plan Panamá País. La realidad es que quien nos administra, debe ser administrado. Quien está al mando, sin excepción, no tiene la capacidad. Aquí hay que hacer un esfuerzo importante, de tomar las cosas en serio y poner actores de verdad en las posiciones de mando. Esto lo he dicho ya públicamente muchas veces. No puede ser que yo tenga a un Presidente de la República poniendo a un equipo de little league, a jugar en las Grandes Ligas, donde sólo puedes invitar a los actores con capacidad, con camino recorrido, con temple, con capacidad de jugar y no a gente que no sabe. Cada vez que vemos cómo se toman las decisiones, vemos a gente incapaz. No nos podemos quedar callados, debemos decir que el problema no son las ideas y los planes. Aquí, panameños inteligentes y comprometidos han propuesto grandes ideas que son realizables, pero son tan buenas como la capacidad de quien las recibe para que se ejecuten. Si quienes están al mando, sin excepción en todas las instancias del Estado, son ‘chambones’, poco podemos esperar.
¿Qué estamos desaprovechando?
La logística aérea y marítima. Es increíble que no vendamos un dólar en Amazon, un dólar en Internet. ¿Puedes? Sí. ¿Tienes la capacidad aérea de conectividad? Sí. ¿Tienes empresas? Sí. ¿Qué necesitas? Alguien con dos dedos de frente que tenga las neuronas y se comunique al mando y te prometo que en menos de seis meses Panamá está facturando, tres, cuatro, cinco, seis, siete billones de dólares. Tenemos todas las herramientas para hacerlo y estamos desaprovechando ese tipo de cosas porque no están las personas capaces en los puestos adecuados.
Hablemos un poco sobre nuestros talentos y el recurso humano.
Cuando me preguntan cuál es mi negocio, digo: la gente. Es increíble la capacidad que tiene el panameño de reinventarse, ser resiliente y creativo en las cosas que ejecutamos todos los días. La cantidad de cosas que estamos haciendo en el tema de energía, bienes raíces, wellness, son 100% atribuibles a la capacidad de las personas de reinventarse, hacer y crear. Panamá no tiene un problema de gente, talentos y productos, sino de gestión. Pero la capacidad de surgir y sobrevivir, la tenemos todos ahí.
¿Qué tan lejos estamos de que nuestra gente se convierta en embajadora de Panamá como marca país?
Hay un inicio. Por ejemplo, estamos empujando para que la marca país sea una. Si vas al Canal, al MOP, al SPI, al MIVI, ATP, Presidencia, MICI, todos tienen un logo y un eslogan; yo digo… hey olvídense de eso y hagan un solo logo y eslogan para todo. Hagamos algo nuestro y que realmente conecte con el panameño, que lo haga propio y se lo venda al mundo.