La Enmienda 25, la posible salida anticipada de Trump de la Casa Blanca
La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, aseguró este jueves que se debe aplicar la Enmienda 25 a Donald Trump por su actuación
Los disturbios registrados este miércoles en el Capitolio de EE.UU. cuando el Congreso validaba el triunfo del demócrata Joe Biden e incitados por el propio presidente Donald Trump, han llevado a políticos de todo color a pedir que se invoque la Enmienda 25, que permitiría sacarlo de la Casa Blanca.
Un día después de los disturbios mortales en el Capitolio, grandes medios de comunicación estadounidenses, líderes demócratas e incluso dirigentes del Partido Republicano han pedido que se invoque este supuesto que está incluido en la Constitución del país para que Trump deje de ser presidente lo antes posible.
La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, aseguró este jueves que se debe aplicar la Enmienda 25 a Trump por su actuación “sediciosa”, y que en caso contrario el Congreso debería iniciar un juicio político al presidente (impeachment).
Muchos temen que los 14 días que restan para que se cumpla su mandato, Trump pueda tomar decisiones que vayan en contra de los intereses del país, aunque el mandatario ha rebajado el tono en las últimas horas y ha dicho que permitirá una “transición ordenada”.
Pero cada vez suena con más fuerza la posibilidad de que se aplique, por primera vez en la historia de Estados Unidos, la sección cuatro de esta enmienda, que permitiría apartar a Trump del Despacho Oval de la Casa Blanca.
Estas son las claves de la Enmienda 25:
Fue creada tras el asesinato del presidente John F. Kennedy, en 1963, y en medio de la Guerra Fría para proteger al gobierno en supuestos como enfermedad repentina del mandatario.
La enmienda fue diseñada para abordar las brechas constitucionales existentes sobre la sucesión presidencial en casos de problemas de salud, pero se puede aplicar en caso de que se considere que el mandatario es “incapaz de cumplir con los poderes y deberes de su cargo”.
Bajo la sección cuatro de esta enmienda, el vicepresidente y la mayoría del Gabinete pueden declarar al presidente inhabilitado para dirigir el país.
Los “oficiales principales de los departamentos ejecutivos” a los que hace mención la enmienda son los 15 miembros del Gabinete, es decir, los secretarios de los diferentes departamentos del Gobierno de EE.UU., el fiscal general y el vicepresidente.
En caso de que el presidente sea apartado del cargo sin su consentimiento, el vicepresidente asumiría inmediatamente y de manera interina la Presidencia y debería nombrar a su vez a un vicepresidente, que debería ser confirmado por ambas cámaras del Congreso.