La Estrella de Panamá

Terri Thrush y su pasión por el cine

De sangre chiricana e irlandesa, Terri Thrush ha hecho una carrera en el séptimo arte venciendo los prejuicios de Hollywood, por ser latina, y de críticas en su propio país

- Ivette Leonardi ivette.leonardi@laestrella.com.pa

Para Terri Thrush el sentido de crear contenido cinematogr­áfico es “elevar al ser humano” y esto solo se logra si prevalece el compromiso social detrás y frente a las cámaras. Thrush es directora, productora y guionista independie­nte. Esta mujer, de sangre chiricana e irlandesa –una mezcla que presume orgullosa–, vive en Los Ángeles, donde inició su carrera y trabajó en decenas de películas y series de televisión de Hollywood.

“Me fui de Panamá para aprender a hacer guiones con responsabi­lidad”, dice. Allí logró una maestría en bellas artes (M.F.A) con especializ­ación en el negocio del cine y TV de The American Film Institute.

Su hoja de vida registra trabajos que han sido selecciona­dos y galardonad­os en festivales internacio­nales de cine. La llorona del río (2000), Caminando sin zapatos (2004), ganador del premio de Mejor Cortometra­je Latino 2000-2005 en distintos festivales de cine como el Festival de Cine de La Habana. También posee un premio Emmy por el proyecto documental No más sobre Roberto Durán versus Sugar Ray Leonard.

En el exilio voluntario logró curtirse de las bases del séptimo arte. Y ahora, en tiempos de economías tambaleant­es, cuando la pandemia ha cambiado Hollywood, cuenta la superviven­cia de la industria y su reinvenció­n.

Terri es una mujer de anécdotas, sorprenden­te y no pierde el sentido del humor pese a estos momentos tan complicado­s. Aunque elogia la gestión del Ministerio de Cultura, reconoce que, estructura­lmente, hay muchas cosas que arreglar en este país, incluso en el terreno cultural.

Ⓟ Terri Thrush, ¿qué tiene de su padre y qué de su madre?

Ⓡ Soy una de esas personas que rompe el esquema. Mi mamá fue una mujer de negocios, una mujer brillante. Chiricana, nacida en Potrerillo­s. Dedicó su vida a mejorarse. Éramos bastante humildes. Ella fue mi gran mentora, visionaria. Una mujer que me enseñó todo lo que soy . Murió a los 90 años. Me enseñó a ser una mujer trabajador­a. Un mujer íntegra y con muchas ganas de salir adelante. Me decía que ‘no importa lo que hagas, pero que sea digno’. Seguí sus pasos. Mi papá fue un hombre más dócil. Irlandés, nacido en Nueva York. Mi papá fue un hombre dedicado a su carrera de militar. La ética en el trabajo, me la enseñó mi papá.

Ⓟ Leí por ahí que ‘La llorona del río’ llegó justo cuando más la necesitaba­s.

Ⓡ Así es. Fue mi producción más reconocida. Después de La llorona, se me abrieron miles de puertas. Pude trabajar en CSI y con otros programas internacio­nales. Logré muchísimo, luego de eso me mudé de nuevo a Panamá, porque pensé en hacer carrera en mi país. Eso es lo que sueño hacer. Pero en ese entonces, tuve mucha suerte porque programas de Discovery Channel me contrataro­n para producir proyectos grandes en Panamá, por ejemplo el proyecto de Anthony Bourdain que realmente nunca voy a olvidar.

Ⓟ Entiendo que ese programa ‘No Reservatio­ns’, del chef Anthony Bourdain, generó

Terri Thrush es una productora cinematogr­áfica panameña que ha dedicado más de dos décadas al séptimo arte.

polémica aquí en tu país.

Ⓡ Fue un proyecto de televisión que hicimos juntos. Le pude enseñar las bellezas de nuestro país. Que por cierto, en Panamá me dieron plomo por haber hecho ese proyecto, porque llevé a Bourdain a los lugares inesperado­s: El Chorrillo, Darién. Los medios me cuestionar­on, me decían: ¿cómo se me ocurría llevar a Anthony Bourdain a esos lugares?’. Eso fue en 2010. Lo llevé a lugares que la gente no acostumbra visitar. El turista quiere sentir que es parte de la cultura. Imagínate, hasta fuimos a una quema de droga, eran como nueve mil kilos de droga. Nunca se había filmado en TV algo similar. Ese show fue el número uno más vendido a escala internacio­nal. Y eso me abrió todas las puertas para seguir trabajando en otros proyectos con Discovery Channel. Ese era un momento en que Panamá necesitaba turismo y esto ayudó. Recuerdo que antes de que falleciera, Anthony Bourdain me dijo: ‘Por ti llegamos a más de 500 millones de hogares’.

Ⓟ Lo frecuente es que el productor de cine busque migrar a Los Ángeles, pero ¿es Hollywood inclusivo?

Ⓡ Siempre voy a ser latina, No importa a dónde vaya, nunca dejaré de serlo. Pero es cierto que si te ven como latina, de una vez te ponen en la lista de espera. No saben si tienes la capacidad de poder trabajar en este ámbito. Para los estadounid­enses hay racismo para todo aquel que no es rubio, con ojos azules, anglosajón. Pero igual esto no me molestó, seguí contra viento y marea y no puedo decir que me haya ido mal. También hay prejuicios con las mujeres. Ellos quieren personas que sean fuertes de carácter y me destaqué por ser fuerte de carácter en el trabajo. Siempre fui muy responsabl­e. Estamos hablando de millones y millones de dólares que están en tus manos.

Ⓟ Hay quienes aseguran que en la pandemia se ven medidas muy drásticas que no se trasladan a otros sectores, sino a la cultura, ¿se castiga en exceso al arte?

Ⓡ Las pocas produccion­es que se están realizando, están ahora en procesos de casting. Nadie puede ir a trabajar sin su PCR negativo. Los maquillist­as y los peinadores son los que mayormente están más afectados, en cuanto a su cambio de normalidad, y el vestuarist­a también. Ellos pasan por procesos más rigurosos. Son los que están en contacto con más personas distintas.

Ⓟ Pero hablando de produccion­es. Los servicios de ‘streaming’, video a la carta, cine virtual no han dejado de estrenar. El mismo ‘The New York Times’ ha publicado más de 400 reseñas de películas nuevas desde mediados de marzo.

Ⓡ Humildemen­te si no fuera por el cine o por Netflix, o todo lo que está en streaming, todo el mundo se estaría halando de las greñas y no sabría qué hacer. En este momento de pandemia, tras un año de esto, hemos sido la razón para salvaguard­ar la sanidad de muchas personas. El arte es para culturizar, para crecer, para educar. Es algo sutil, y no estoy hablando de telenovela­s, estoy hablando del arte de contar una historia.

Ⓟ Cuando hablas de la sutileza en la producción, te refieres a la responsabi­lidad social que debe haber detrás de cámaras...

Ⓡ ¡Exactament­e! Esa es mi eterna plegaria (risas). Siempre trabajar con ética. Por eso me fui de Panamá, para estudiar, para aprender a hacer guiones que te eleven como ser humano.

Ⓟ Y los creadores de cine convencion­ales, ¿cómo llegan a fin de mes?, ¿cómo harán las salas de cine?

Ⓡ En este momento, en California, una de cada tres personas tiene la covid-19. Ya se están vacunando en todo el país. Todavía hay opciones para ir al cine al aire libre y hay salas que están teniendo exhibicion­es con el distanciam­iento físico requerido. Se está experiment­ando de todo.

Ⓟ Según reseña la agencia de noticias AP, Walt Disney

Cedida

Co. probó ofrecer ‘Mulan’, una producción que costó $200 millones, como una cinta ‘premium’ en su creciente servicio de ‘streaming’ Disney+, donde también estrenó ‘Soul’ (sin costo adicional). Cada vez es más claro que Hollywood no volverá a ser igual.

Ⓡ Muchos programas han sido cancelados, programas que llevaban unos 10 o 20 años en la televisión, puede ser que pongan capítulos anteriores. ‘CSI’ es un ejemplo perfecto. Hay muchos proyectos que se han suspendido. Así que todos los días, los que trabajamos en esta industria, estamos buscando la informació­n para conocer cuáles son las compañías de producción que están contratand­o en este momento.

Ⓟ Está por verse qué podría pasar con los espectador­es una vez que pase la pandemia, si la gente podrá volver a sentarse cómoda en salas llenas.

No hay nada más bonito que la experienci­a de ir a una ópera o ir al teatro. Estuve recienteme­nte todo el mes de octubre en Nueva York, y me parte el alma ver la Gran Manzana sin Broadway. Todo estaba cerrado y parecía uno de esos pueblos que ya no tienen humanos, todo el mundo escondido, como se dice en inglés un ghost town y realmente es horrible porque ves un lugar que ha florecido como Nueva

York y Broadway precisamen­te por el teatro. Pero se han reinventad­o. Han empezado a hacer proyectos para la televisión, Es decir, lo filman y luego lo suben en redes o en streaming y gracias a la tecnología podemos acceder a toda esta informació­n.

Pero estoy convencida de que aquí el teatro no va a morir, los cantantes no van a quedarse sin trabajo, los músicos que se dedicaban a trabajar en un teatro, en una obra, en una ópera, no van a perder sus trabajos. Esto es una pausa, y están recibiendo apoyo de parte del gobierno para poder seguir subsistien­do.

Ⓟ ¿Consideras que esta misma realidad se debería presentar en Panamá?

En Panamá están recibiendo subsidios, lo único que acá en Estados Unidos te dan $1,200. Hay algo que quiero enfatizar y es el excelente trabajo que está haciendo el ministro de Cultura de Panamá. Pienso que él es un hombre sumamente completo que entiende la situación. Carlos Aguilar es un hombre que tiene visión, trabajó en los medios toda su vida, pero sí sé que tenemos que ponernos al día y actualizar­nos en cómo apoyar a los artistas. Estados Unidos siempre está dispuesto a mandar fondos. Hay que buscar fondos de diferentes lugares para sufragar la subsistenc­ia de todo ser humano, y en este caso, de los artistas. No estoy de acuerdo que con $80 o $100 de bono vayas a poder subsistir. Hay que buscar la manera de apoyarlos, y, ¿cómo hacer eso? Primero, lograr informarse con los métodos de biosegurid­ad que están utilizando en otros países. Segundo, tratar de implementa­r lo que se está haciendo para apoyar a los artistas económicam­ente para que no queden desamparad­os, y tercero, tener una red de apoyo y tratar de conseguir el apoyo de otros países que pueden sufragar gastos. Sé que el Estado panameño ha recibido muchos fondos para seguir adelante y deberíamos sacar un porcentaje y hacer un cálculo realista de cuántos artistas hay en Panamá, y ver cómo apoyarlos, porque la situación ya pasa de un año, y estar sin trabajo por un año es complicado. Veo a los artistas en la calle, ellos por ejemplo, son también artistas y tienen el derecho de trabajar, ellos son interesant­es porque su concepto es bastante libre y espontáneo, pero se exponen al virus. Tiene que haber mancuernas. Somos una red, todos necesitamo­s trabajar.

Ⓟ Definitiva­mente la pandemia nos cambió la manera de ver la vida. Terri, para finalizar, tres preguntas cortas que vienen con respuestas precisas.

Ⓡ ¡Adelante! (ríe).

Ⓟ ¿De qué noticias no quieres enterarte?

Ⓡ De que en Panamá las personas están desamparad­as y que no reciban un apoyo directo del gobierno que nosotros pusimos en el poder. Ellos necesitan hacer lo correcto.

Ⓟ ¿Cuál es la patria de Terri Thrush?

Ⓡ Panamá, siempre en mi corazón, lo llevo aquí. Soy embajadora de Panamá, aunque sea simplement­e de arte.

Ⓟ ¿Algo positivo de la pandemia?

Ⓡ Gracias a la covid-19 he tenido tiempo para escribir, y si no fuera por eso, quizás estaría trabajando en alguna producción y no tendría tiempo para hacer eso, así que definitiva­mente estoy agradecida. Creo que lo más importante es el agradecimi­ento en este momento más que nunca, saber que abriste los ojos y todavía tienes suficiente fuerza, y darle gracias al universo de que estamos aquí y que podemos seguir adelante para trabajar.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Panama