Elecciones universitarias en pandemia
La Universidad de Panamá (UP) llevó a cabo las elecciones universitarias, el día 30 de junio del presente año, para escoger autoridades, en las que participaron como candidatos: el actual rector, Eduardo Flores, catedrático de Física; César García, catedrático de Matemática; Miguel Cañizales, catedrático de Psicología Comunitaria; y, Roberto A. Chong, catedrático de Facultad de Administración de Empresas y Contabilidad (Faeco).
Con lo anterior, observamos que esta elección ha contado con representantes de distintas áreas, lo cual ciertamente ha sido sumamente significativo, aunque en esta fiesta electoral no se presentó ningún candidato del sexo femenino, pese a que existen numerosas docentes que reúnen los requisitos y las exigencias para ello.
Luego de haber examinado cada una de las propuestas de los candidatos, se ha reelegido al actual rector, Dr. Eduardo Flores, para ocupar ese cargo por el periodo 2021-2026, a la vez que se han elegido otras autoridades en la Universidad de Panamá.
Concluido el torneo electoral, considero que hay muchas lecciones que aprender, pues el resultado final, en general, para muchos no ha sido fácil, para otros, no ha sido sorpresa, y algunas de las situaciones que se presentaron deben ser un llamado de atención para el Organismo Electoral, entre otros, por las quejas de profesores, estudiantes y administrativos que no pudieron ejercer su derecho al voto por no estar en el padrón electoral, lo cual se denunció a través de los medios de comunicación social, el reforzamiento de la capacitación electoral para los jurados de mesa, si bien hay que felicitar al Organismo Electoral, porque el proceso electoral universitario se llevó a cabo organizadamente en tiempo de pandemia.
Del torneo electoral queda una tarea para los estamentos universitarios y es que tenemos que evaluar y revisar el reglamento actual de elecciones universitarias, motivado por los comentarios o las críticas que se han vertido durante la contienda electoral en los pasillos de la Casa de Méndez Pereira y por los medios de comunicación social, entre los que podemos mencionar lo referente al voto desigual (voto ponderado), la reelección, sobre si los administrativos deben o no votar, y si todos los profesores deben participar en las elecciones o solo los catedráticos, como sucede en otros países, si todos o no todos los estudiantes deben votar o solo un porcentaje de los mismos, sobre la financiación y duración de las campañas electorales, tal como se sigue en otras universidades extranjeras, y a la cual nuestra universidad debe adecuar su normativa.
Por otro lado, no es de extrañar que, como en toda contienda electoral, se genere una crisis o tensión postelectoral, pero hay que recordar que los adversarios políticamente ya desaparecieron, por lo que es hora de dedicar nuestro empeño a trabajar en conjunto por la Universidad de Panamá, y a eventualmente regresar a clases presenciales, por lo que debe respetarse, como bien lo ha indicado el actual rector, Eduardo Flores, en su propuesta electoral, que hay que mantener el “derecho a disentir sin temor a represalias”.
En este orden de ideas, las nuevas autoridades universitarias electas rumbo a la transformación académica integral, a la investigación, tecnología, innovación y desarrollo y a la consolidación de los Estudios de Posgrado, entre otros, no pueden desechar las propuestas atinadas elaboradas por los candidatos no elegidos; entre estas, mantener la edad de retiro a los 75 años de edad, las pruebas psicológicas a profesores y administrativos, la descentralización administrativa, la creación de una plataforma especial para la Universidad de Panamá, y la descentralización de los procesos académicos.