Conociendo las enfermedades cardiometabólicas
TRASTORNOS DEL CORAZÓN
Las enfermedades cardiometabólicas son trastornos del corazón y de los vasos sanguíneos que suelen desarrollarse, en su mayoría, por estilos de vida poco saludables y suelen ocurrir por la ateroesclerosis, un endurecimiento que se origina en las arterias cuando se da una acumulación de grasa, colesterol u otras sustancias en las paredes de las arterias.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año mueren más personas por esta patología que por cualquier otra causa, y asegura que el 80% de los infartos del miocardio y de los accidentes cardiovasculares prematuros se pueden prevenir, llevando a cabo una detección temprana, manteniendo un estilo de vida saludable y un constante control de los diferentes factores de riesgo que pueden desencadenar en complicaciones. Dentro de los principales riesgos cardiometabólicos están: la falla cardíaca: En 2016, alrededor de 64 millones de personas en el mundo presentaron un diagnóstico de falla o insuficiencia cardíaca, representando uno de los problemas más importantes, y en aumento, de la salud pública. La falla cardíaca es considerada una enfermedad crónica degenerativa, y se calcula que la mitad de los pacientes fallece cinco años después de su diagnóstico.
Diabetes: Se calcula que al año mueren 4,2 millones de personas en el mundo a causa de la diabetes y su prevalencia ha aumentado más rápidamente en los países de ingresos bajos y medios que en los países de ingresos altos. Proyecciones apuntan que para 2030, más de 578 millones de adultos a nivel mundial serán diagnosticados con esta enfermedad. Hipertensión: En 2015, la enfermedad registró 9,4 millones de fallecimientos prematuros. En el mundo, el 25% de los hombres (1 de cada 4 hombres ) y el 20% de las mujeres (1 de cada 5 mujeres) sufren hipertensión arterial elevada y solo una quinta parte de ellos mantiene controlada la enfermedad, según datos de la OMS.
Dislipidemia: es considerada una enfermedad asintomática, y solo presenta alguna señal en una etapa avanzada, generando complicaciones en la persona como infartos cerebrales, pancreatitis aguda o enfermedades coronarias. Entre las principales causas están los malos hábitos alimenticios, como las dietas ricas en grasas y poco saludables, añadiendo inactividad física y tabaquismo. También se puede dar otros factores de riesgos asociados a la enfermedad como la diabetes, hipotiroidismo o la obesidad.