Un segundo lote de documentos secretos pone en aprietos a Biden
Los abogados del presidente Joe Biden hallaron un segundo lote de documentos clasificados, políticos y personales, en el garaje de la residencia ubicada en Delaware. Los papeles corresponden a la época que Biden fungió como vicepresidente de Barack Obama (2009-2017), aseguró este jueves la Casa Blanca.
Es la segunda revelación de esta naturaleza que ocurre en esta semana, aunque aún es un misterio el contenido de los documentos, el porqué de las búsquedas y por qué están en ese lugar.
Ante el hallazgo, Biden dijo a los periodistas que todo se iba a aclarar. “Por cierto, mi Corvette está en un garaje cerrado, así que no es como si estuvieran sentados en la calle”. Enseguida indicó que se toma en serio los documentos y material clasificado.
No es el único material clasificado que han encontrado a Biden. Pocos días antes de la elección de medio mandato, el 2 de noviembre de 2022, Richard Sauber, abogado especial contratado por la Casa Blanca, descubrió una pequeña cantidad de documentos con marcas clasificadas en las oficinas de Penn Binden Center, que ocupó Biden después de dejar la vicepresidencia en 2017 hasta que inició su campaña presidencial luego de dos años.
Los papeles estaban dentro de un armario cerrado, según el comunicado emitido por Sauber. A renglón seguido, los juristas notificaron a la oficina de la Casa Blanca y esta notificó a su vez a la Administración Nacional de Archivos y Registro.
La ley de registros presidenciales exige que todos los documentos de la Casa Blanca deben enviarse a la Administración
Nacional de Archivos y Registros cuando termina un periodo presidencial.
“Desde el descubrimiento, los abogados personales del presidente han cooperado con los Archivos y el Departamento de Justicia en un proceso para garantizar que todos los registros de la administración Obama-biden estén debidamente en posesión de los Archivos”, dijo Sauber a los medios de comunicación estadounidenses.
En el pasado, Biden calificó como irresponsable la decisión del expresidente Donald Trump de quedarse con cientos de registros privados en su casa de Mar-a-lago en la Florida, de donde el FBI confiscó 33 cajas incluidos más de 100 papeles en los que se leía: clasificado.
Este segundo lote de papeles encontrado podría meter a Biden en un problema similar al que experimenta Trump. La presencia de material secreto en la casa Trump ocasionó que el FBI allanara su residencia ante la negativa de entregarlos a las autoridades. Ahora Trump es quien pregunta en sus redes sociales cuándo el FBI va a hacer lo mismo en las casas de Biden y la Casa Blanca.
La diferencia entre ambos casos, según señalan medios internacionales, es la disponibilidad de entregar los papeles a las autoridades. Mientras que el equipo de Biden lo hizo de forma voluntaria al percatarse del material, las autoridades tuvieron que insistir en varias ocasiones a los abogados de Trump para que los entregara.
De los papeles de Biden poco se sabía. El caso se destapó cuando los republicanos ganaron la mayoría en el senado en las pasadas elecciones intermedias. Antes de la victoria los republicanos ya habían prometido ser enérgicos con las investigaciones contra Biden. La Casa Blanca también se había preparado por meses para ser minoría en el senado. Algunos críticos de Trump consideran que se trata de una de sus maniobras para disuadir el caso en su contra y poner a Biden en el mismo escenario.
Tanto Trump como Biden defienden que los papeles estaban en un lugar seguro de sus respectivas casas. El primero interpuso una demanda al FBI por el registro a su residencia y solicitó la devolución de lo que no estuviera incluido en la orden judicial que autorizó el allanamiento.
En el caso de Biden, las autoridades encontraron papeles secretos en tres localidades distintas que son de su propiedad o fueron usadas por él.
El caso será investigado por el fiscal especial Robert K. Hur, quien ejerció en Maryland y trabajó en el Departamento de Justicia durante la era Trump.