El sueño de Gerald
El Operativo Mercurio IV busca reducir la cantidad de ‘aulas rancho’, en la Comarca Ngäbe Buglé, cambiándolas por aulas modulares, para que los niños de zonas apartadas, puedan estudiar en un ambiente seguro
Gerald Palacios es un niño de 12 años que está por cursar el sexto grado, en un colegio ubicado a las afueras de la comunidad de Mayo, comarca Ngäbe Buglé. El sueño de este niño es ser profesor, pero la enorme distancia entre su comunidad y el colegio, ha sido un obstáculo enorme para su educación.
“Es peligroso, porque camino solito y para llegar a mi escuela y no hay puente, así que me toca cruzar el río”, dijo a
La Estrella de Panamá.
Aun así, las caminatas de dos horas no le han impedido a Gerald destacarse en sus estudios. “Tengo 4.9, pero tengo que estudiar en la noche”, explicó, detallando que se sale de su casa todos los días, a las 6:00 a.m.
Historias como las de Gerald son las que han impulsado el Operativo Mercurio IV, que busca reemplazar 15 aulas rancho, ubicadas en la Comarca Ngäbe Buglé, por escuelas modulares, antes de que comience el año escolar.
“No habíamos visto algo así antes. Nuestras escuelas eran de madera y, aunque hacemos lo posible para que los niños estudien, ellos se sentían incómodos” aseguró Diógenes Ábrego, un padre de familia de la comunidad de Saneti, donde 400 estudiantes han tenido que aprender en ‘escuelas rancho’.
“Estamos contentos por estas escuelas. Antes mis hijos tenían que cruzar el río [para ir al colegio], pero ahora con estas aulas pueden estudiar sin hacerlo”, dijo Simona Ábrego, moradora de una de las comunidades en la Comarca Ngäbe Buglé, en la que 400 alumnos buscan salir adelante, a través de la educación.
El proyecto, que tiene un avance cercano al 75%, abarca el desarrollo de 15 salones con capacidad entre 30 a 60 estudiantes, que están siendo instalados en 11 comunidades de difícil acceso, a orillas del río Cricamola, notificó el comisionado del Servicio Nacional Aeronaval (Senan), Eliécer Cárdenas.
Cárdenas dijo a este medio que de las 15 aulas modulares, se han introducido 13 [en la comarca], que beneficiarán a 7.500 estudiantes.
“Se trata de una operación sin precedentes. La fuerza pública y la Fuerza Bravo nunca había operado en conjunto, en la Comarca Ngäbe Buglé”, aseguró el comisionado.
El funcionario explicó que las operaciones Mercurio I, II y III, se realizaron en la provincia de Darién, y que, en su etapa IV, se tomó la decisión de incursionar en Ngäbe Buglé, para “llevar ayuda” a zonas de difícil acceso, como Trinchera y Monuni III. En total, se espera llevar 500 mil libras de carga, para la construcción de estas aulas y 6.500 bolsas de comida, además de medicamentos, detalló Cárdenas.
El operativo, que va en su segunda fase, inició en noviembre y se está desarrollando en colaboración con el Joint Task Force-bravo y el Comando Sur de Estados Unidos. Sobre la colaboración que Panamá y Estados Unidos están teniendo en este operativo, el sargento primero John Colwell, encargado de las cargas y operaciones, aseguró que ha sido “exitosa”.
“Hemos completado 11 modulares y repartido cerca de 2.000 bolsas de comida, en las comunidades más apartadas, y esperamos terminar con la misión este miércoles”, detalló.
En total, se están utilizando 10 helicópteros para el transporte de los materiales, de los cuales, ocho son de Estados Unidos y dos de Panamá.
Con relación a las aulas, Cárdenas apuntó que son de fácil armado y que están listas en un periodo de seis a diez días, dependiendo de las condiciones del lugar donde se instalen.
De los 15 salones, tres se encuentran totalmente armados, puntualizó el comisionado, quien detalló que estas aulas están diseñadas para durar cerca de 50 años. “El piso de las aulas está hecho de fibra de cemento y las paredes y el techo de panel sandwich”, puntualizó.
Al ser consultado sobre el mobiliario para estos salones, Cárdenas comentó que la fase actual abarca el transporte de materiales y confección de salones. “No vamos a inaugurar estás escuelas hasta que estén listas. Todas las escuelas que se hacen, se entregan con su mobiliario”, alegó.
Sobre las agrodistribuidoras del Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA), mencionó que “hay nueve agrodistribuidoras modulares que se están construyendo en la comarca, cuatro en el sector norte y cinco en el sector sur de la comarca”.
“Cada agrodistribuidora es el triple de grande que un aula modular y tienen el objetivo de llevarle alimento a las comunidades de difícil acceso”, concluyó.
Esta iniciativa cuenta con la participación del Servicio Nacional de Fronteras, la Policía Nacional, el Ministerio de Seguridad, el Ministerio de Educación y el Ministerio de Gobierno.