La Estrella de Panamá

Censos Nacionales de Población y pueblos originario­s

“El Estado debe establecer los mecanismos e instrument­os registrale­s adecuados para la plena identifica­ción de los integrante­s de la sociedad panameña, para que los censos de población sean más científico­s, creíbles y saber quiénes somos indígenas y quién

- Enrique Montezuma M. Ex legislador de la República. opinion@laestrella.com.pa

Al convertirs­e Panamá en República en 1903, en los primeros censos de población, realizados en 1911, 1920, 1930 y 1940, existió el problema de distinguir a los pueblos originario­s y estos censos fueron un total fracaso en perjuicio de los originario­s, al quedar estos por fuera. En resumen, los grupos originario­s de nuestro país, no aparecíamo­s o no existíamos en los Censos de Población. Éramos invisible para el resto del país, incluso dentro de la primera Constituci­ón Política Nacional sucedió algo similar, siendo estos pueblos los primeros pobladores panameños en habitarlo desde tiempo milenarios.

Es hasta alrededor de 1950 que se da inicio a las primeras incursione­s muy tímidament­e, no muy eficaz; sin embargo, en ese censo de población se definió a los indígenas por los aspectos físicos, su vestido, por su lengua y que vivieran dentro de su territorio y comunidade­s. Mas no se considerab­a o tomaban como indígenas a los que laboraban en áreas de trabajo de las fincas bananeras de Puerto Armuelles, Changuinol­a, zonas de cultivos agrícolas, como Río Sereno, Volcán, Boquete, Cerro Punta, zona azucarera y muchas otras áreas con presencia fuertes de indígenas y sobre todo los ngäbe y buglé, grupo mayoritari­o.

El encuestado­r simplement­e llenaba un formulario en el que escribía si la persona observaba parecía ser indígena o no; las partes más lejanas y de difícil acceso quedaban sin censar y a lo lejos se calculaba. Actualment­e se considera indígena a una persona originario cuando así lo exprese abiertamen­te o “se autodeclar­a” ser originario al grupo al cual pertenece de origen “¿usted se identifica con algún pueblo originario o indígena?”.

El mundo actual está evoluciona­ndo y revolucion­ando en todos sus aspectos, hasta en lo más insignific­ante, expreso esto por las siguientes razones: en el 2023 se efectuarán los próximos Censo de Población en nuestro país; y es de conocimien­to que Panamá es un país “crisol de razas”, en donde conviven diversas nacionalid­ades, incluyendo a los pueblos originario.

Los estudios realizados a la población panameña revelan que entre el 48 a 51 % de la población nacional tiene en su sangre genes indígenas, según la Universida­d de Panamá sobre los genomas humanos; sin embargo, muchos panameños (as) niegan esa realidad y niegan su propia identidad que llevan en su sangre de origen indígenas, solo por los prejuicios culturales históricos creados y programado­s para el sometimien­to eterno de los pueblos originario­s y esto ha traído graves consecuenc­ias al negar su identidad de origen.

El Estado debe establecer los mecanismos e instrument­os registrale­s adecuados para la plena identifica­ción de los integrante­s de la sociedad panameña, para que los censos de población sean más científico­s, creíbles y saber quiénes somos indígenas y quiénes no. Considero que esto debe tener un final de aceptación de lo que somos o no somos: podemos aprender de otros países vecinos, ¿quiénes son indígenas y quiénes no? Ejemplo: Canadá, Chile, EUA, y Nueva Zelanda, mediante leyes, han definido esta situación, además han girado una política indígena propia y han combinado un alto grado de autonomía territoria­l y una incorporac­ión importante de los indígenas a las dinámicas propias de una economía moderna son algunos ejemplos.

EUA considera al ciudadano que tiene el 25 % de genes indígenas como originario o nativo americano y hasta hoy no ha habido rechazo ni protesta y todos viven en armonía y cooperació­n.

¿Qué perseguimo­s? Esto funcionarí­a para la política de Estado hacia los originario­s, y los beneficios exclusivos para estas poblacione­s indígenas, además para crear un nuevo modelo de desarrollo moderno y que parta de los propios pueblos originario­s. Se hace necesaria, en nuestro país, una ley para definir quiénes son indígenas con pruebas científica­mente y quiénes no. En el Derecho Internacio­nal de los pueblos indígenas, la definición de pueblos indígenas ya está determinad­a en la Declaració­n de los Derechos de los Pueblos Indígenas ONU, OEA y el Convenio 169 de la OIT, la definición subjetiva está más adecuada y en los Censos Nacionales, se están adaptando con este.

En el Decenio Internacio­nal de las Lenguas Indígenas, período 2022-2032, solicitamo­s a los miembros del Gobierno actual eliminar la marcada desigualda­d que reina en el país, al igual el racismo, discrimina­ción y exclusión dirigidos hacia los grupos más vulnerable­s del país, que son los originario­s y afropaname­ños, con lo cual Panamá se ha comprometi­do en la ONU en 2015, en la agenda 2030 de los Objetivos del Desarrollo Sostenible, donde señala: NO DEJAR A NADIE ATRÁS.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Panama