Condenado por millonaria estafa vuelve a prisión
Alfredo Rafael Fretes Gill, condenado a 6 años de prisión por la defraudación de US$ 6 millones a través de la casa de cambios Paraguay Express donde se desempeñaba como directivo y accionista, debe regresar a la cárcel de Tacumbú.
Así lo resolvió el Tribunal de Apelación, 1ª sala, al anular la resolución mediante la cual el juez Fabián Weisensee lo favoreció con el arresto domiciliario bajo fianza de G. 500 millones, el 31 de enero pasado.
Por unanimidad, los camaristas Gustavo Ocampos, Pedro Mayor Martínez y José Agustín Fernández resolvieron hacer lugar a la apelación presentada por el fiscal Miguel Vera y por el querellante Alberto Poletti, contra la resolución dictada por Weisensee en el último día de la feria judicial.
“Es perfectamente observable y entendible según claras disposiciones del artículo 367 segundo párrafo, que las cuestiones vinculadas a la libertad del acusado sea sobre su detención, prisión u otras medidas cautelares diferentes a aquellas, deben ser resueltas por el tribunal”, dijo Mayor Martínez.
“El magistrado inferior actuó como miembro de un tribunal unipersonal de sentencia, en contravención a lo dispuesto en el artículo precedentemente citado (...)”, agregó Fernández.
En consecuencia, Fretes Gill deberá ser conducido de su residencia hasta la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, para cumplir su condena por estafa y conducta indebida en situación de crisis. Paralelamente, la Corte audita la actuación del juez Weisensee, quien actuó al margen de la ley.