El repunte espacial tendrá que esperar
CABO CAÑAVERAL, Estados Unidos (AFP). La Casa Blanca ha abogado por una nueva era de liderazgo en materia espacial, pero esto no se ve respaldado en la prática, con ajustados presupuestos, vacancias en puestos importantes y el creciente rol del sector privado en innovación aeroespacial, afirman expertos.
Algunos son escépticos ante esta retórica oficial. Por ejemplo, el 4 de julio marcó un hito nada alentador: ese día se batió un récord de mayor tiempo por parte de un presidente electo sin nombrar un director de la NASA. El anterior récord de 164 días se remonta a 1971.
Tampoco se ha nombrado a nadie al frente de la oficina de Ciencia y Tecnología de la Casa Blanca, en otro tiempo un puesto clave desde el que se confeccionaba la agenda de la NASA.
Al parecer, la forma en que Trump revisará y actualizará los planes espaciales de su antecesor es reviviendo al Consejo Nacional Espacial, ahora dirigido por Pence, un entusiasta del espacio y quien asegura que este panel tendrá su primera reunión –que incluirá a los secretarios de Defensa, Comercio, Transporte y Seguridad Interior– antes de que termine el verano.
Además, el presupuesto propuesto por Trump para la NASA –que aún debe ser afinado por los legisladores– de 19.100 millones de dólares representa un pequeño, pero notorio recorte con respecto al año anterior (0,8%). El presupuesto definitivo se conocerá en 2018.