Ingresos que rayan el escándalo
Que los salarios y beneficios adicionales de los directivos de la entidad binacional denominada Itaipú son de primer mundo, e inclusive estratosféricos, nadie pone en duda hoy en la República del Paraguay, copropietaria, en condominio, por partes iguales del complejo hidroeléctrico binacional, así como de su energía. Veamos un caso, el de director general paraguayo, James Spalding Hellmers, que octubre último percibió la suma de 125.455.543 guaraníes.
Las coyunturas electorales
Las coyunturas electorales tienen el extraordinario poder de iluminar ciertos rincones, especialmente de la administración pública que generalmente permanecen obscuros y hasta ignorados por la prensa. En el caso del máximo ejecutivo paraguayo de estamento ejecutivo de la entidad paraguayo/brasileña, la tormenta preelectoral, específicamente las ocasionadas por internas del Partido colorado, arrastró ayer hasta las playas del periodismo datos reveladores sobre el nivel económico que disfrutan nuestros representantes en las entidades binacionales.
Un revelador cuadro acerca de los viáticos que usufructuaron casi una veintena de funcionarios de Itaipú, informa a la opinión pública que, entre otros, el director general paraguayo percibió 2.145.000 en este concepto por un viaje que hizo a Ciudad del Este, y 14.125.511 guaraníes, también en por viáticos por el viaje que realizó a París el mismo mes.
Los viajes, según la planilla oficial que llegó a nuestro poder, en el caso de Spalding, como justificación tienen el siguiente título: “servicio de la propia área”.
Las sumas de referencia, si las consideramos en forma aislada, hasta podrían parecer poco significativas.
En efecto, a esos gastos del director general paraguayo de Itaipú, de acuerdo con las planillas oficiales que desde hace un tiempo publica la entidad binacional obligada por la ley de acceso a la información pública, debemos adicionar la cantidad que recibió en octubre último en concepto de salario: 106.871.738 guaraníes; más el ¡auxilio para alimentación!, 2.313.294, superior inclusive al salario mínimo nacional que, con el último ajuste alcanzó la suma de 2.041.123 guaraníes.
El renglón en cuestión, el caratulado como “auxilio a la alimentación”, además de permanente es un privilegio inherente a los apetecidos cargos que ofrece la entidad binacional, pero justificables solo excepcionalmente.
“Ojalá estos exclusivos niveles salarios y de otros beneficios, también exclusivos de las binacionales, se correspondan con la defensa que hagan de los intereses nacionales”, apuntaba un técnico del sector Energía.