Recalde defenderá Acta en San José
Los responsables del Acta de Entendimiento, así como de la Nota Reversal sobre la situación de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), no se quedan quietos y, por su andarivel, buscan convencer de las bondades de su producto, generalmente a gente “convencida”, gremios afines al oficialismo o de empresarios que desean participar en el proyecto de construcción y equipamiento de la nueva central hidroeléctrica sobre el brazo Aña Cua del río Paraná.
Una gacetilla de la Asociación de Electricistas Sanjosianos, en el marco del encuentro de asociaciones de electricistas del Paraguay (FAEP), ofrecerá la defensa del ingeniero Ángel María Recalde, director de la EBY, sobre el Acta del Entendimiento al que llegaron él, su equipo y representantes del Poder Ejecutivo.
El encuentro de los electricistas sanjosianos está programado para el sábado 25 del presente mes en el salón ex Zulia (Antolín Irala casi Gral. Patricio Escobar, en San José de los Arroyos.
La defensa del ingeniero Recalde fue programada para las 17:00, en tanto que la primera charla técnica, sobre la Ley 5668, de verificación y control de productos y servicios de las instalaciones eléctricas arrancará a las 15:30.
Esta exposición, según el material informativo de referencia, fue encargada al ingeniero Ricardo Ramírez, director de Reglamentación del Instituto de Tecnología y Normalización (INTN).
La única explicación posible, al menos desde la perspectiva del derecho, de la abrumadora hegemonía administrativa brasileña en Itaipú es el papel de financista en el proyecto y del cual se jacta.
Eso explica por ejemplo, además de la indiscutida titularidad de las direcciones más relevantes del Directorio Ejecutivo de la entidad binacional, como la Financiera y la Técnica, que el director general brasileño tuviera hasta 1986, en un colegiado de doce miembros, seis de ellos paraguayos, la injustificable atribución del voto de desempate. Hoy, a pesar de las modificaciones del estatuto en 1986, el aparente equilibrio se quiebra en mil pedazos cuando se coteja el campo de acción de las seis direcciones, así como las atribuciones de sus titulares. “Brasil puso la plata y Paraguay solo el agua”, nos decían los defensores de entonces de ese statu quo. ¡Prestó! y con soberbias tasas de interés. Paraguay no puso solo el agua. Además del agua, el único factor insustituible en una hidroeléctrica, también financió la obra entre 1985 y 1992, así lo prueba la NR Nº 4 del 28 de enero de 1986.
Ramón Casco Carreras (rcasco@abc.com.py)