Evo, candidato “imprescindible”
LA PAZ (AFP). El presidente de Bolivia, Evo Morales, cumplió ayer doce años en el gobierno, confirmando ante el Congreso su decisión de permanecer en el poder hasta 2025, en contrarruta de sectores que le exigen respetar un referendo que le negó esa posibilidad.
Morales ostenta ya la Presidencia más larga de la historia de Bolivia.
Llegó al poder en enero de 2006. Ahora, se presenta como el candidato inamovible e imprescindible, mientras que los sectores sociales y el MAS (oficialista) piensan en quién lo acompañará dado que su vicepresidente García Linera descartó ir a la reelección.
Su discurso recurrente es que su país es el que más crece en Sudamérica. Sin embargo, la economía boliviana aún depende de la venta de sus materias primas al exterior y no termina de dar el salto hacia la industrialización de los recursos naturales prometida por Morales en la campaña electoral de 2005 que le llevó al poder.
La oposición y organizaciones civiles se oponen al deseo del mandatario de ser reelegido hasta 2025, luego de que a fines del año pasado fue favorecido por un fallo del Tribunal Constitucional que dio luz verde a su nueva candidatura, pese a lo resuelto en un referendo que en 2016 le negó en las urnas esa posibilidad.
Evo consideró que detrás de la agitación social y política que vive Bolivia –que comenzó en diciembre con una huelga de médicos durante 47 días y por promulgación, pero luego abrogado nuevo Código Penal– hay una “conspiración de grupos de derecha” para impedir su cuarta reelección.
La nueva legislación penal ocasionó una huelga de médicos, porque este sector consideraba que uno de sus artículos penalizaba su labor profesional. En las últimas semanas las protestas se masificaron y otros sectores empezaron a manifestarse sobre otros artículos que consideran les afecta, entre ellos colegios de profesionales, transportistas, entidades cívicas, gremios de periodistas y las iglesias católica y evangélica.