Fiscalía pide prisión para indígenas que explotaban a niños en Asunción
La fiscala Teresa Martínez imputó y pidió prisión para ocho nativos de la etnia Mbya Guaraní, detenidos ayer de madrugada en el centro capitalino. Bajo su poder había seis menores que fueron rescatados, pues eran explotados sexualmente.
La agente fiscal de la Unidad Especializada en Lucha contra la Trata de Personas, Teresa Martínez, determinó imputar por los hechos de trata de personas con fines de explotación sexual y proxenetismo a 8 de los 10 nativos de la parcialidad Mbya Guaraní, que fueron detenidos en un allanamiento realizado en un aguantadero ubicado entre las calles Luis Alberto de Herrera y Don Bosco del centro de Asunción.
Además, dicha agente del Ministerio Público solicitó al Juzgado de turno la prisión preventiva para ellos.
La fiscala Martínez encabezó el operativo realizado ayer a las 5:00, y contó con el acompañamiento del Departamento Anti Trata de Personas y Delitos Conexos de la Policía, a cargo de la comisaria Marina Franco, así como de funcionarios del Instituto Paraguayo del Indígena (Indi) y de la Secretaría Nacional de la Niñez y Adolescencia (SNNA).
En el lugar se constató la presencia de varios indígenas, entre ellos seis menores de entre 8 y 11 años y 10 personas adultas, de los cuales 7 eran varones y 3 eran mujeres, mayores de edad. Todos oriundos de la localidad de J. Eulogio Estigarribia (ex Campo 9), departamento de Caaguazú.
La intervención tuvo lugar luego de que la Secretaría de la Niñez haya recibido una denuncia relacionada a un presunto caso de explotación sexual en menores indígenas por la zona.
De acuerdo con los datos, los niños y niñas, quienes fueron rescatados del lugar, eran víctimas de explotación sexual por parte de los adultos que se encontraban con ellos al momento del allanamiento, quienes con las ganancias que obtenían, posteriormente compraban caña u otro tipo de sustancias.
Según la información brindada por los intervinientes, los miembros de la rosca captaban a los menores en la jurisdicción de la ciudad de J. Eulogio Estigarribia y luego los trasladaban a Asunción, donde además de estar expuestos a todo tipo de peligros, eran explotados sexualmente.
Por su parte, los adultos fueron detenidos de manera inmediata por agentes policiales del departamento Anti Trata de Personas, quienes luego los llevaron hasta la Unidad de Martínez, donde prestaron su declaración indagatoria.
Posteriormente, se solicitó la presencia de agentes de Identificaciones para que les tomen los datos y las huellas dactilares.
Mientras que los menores fueron llevados a un refugio con el que cuenta la Secretaría de la Niñez para brindarles asistencia.