Corte decide hoy si Lula continúa libre o va a prisión
BRASILIA (EFE). La Corte Suprema de Brasil juzgará hoy el recurso de habeas corpus interpuesto por el expresidente brasileño Lula da Silva para evitar ir a prisión.
El anuncio se dio luego de que el Tribunal Regional Federal de Porto Alegre fijara para el lunes 26 el juicio por el recurso interpuesto por Lula contra la pena a 12 años de prisión a que fue condenado por corrupción y cuya decisión puede llevarlo a prisión.
Este juicio es determinante para el futuro del exmandatario brasileño ya que si la mayoría de los 11 magistrados acepta el recurso de habeas corpus, Lula podrá librarse de la prisión tras su condena en segunda instancia.
“Si se atreven a detenerme, estarán cometiendo una barbaridad jurídica y seré un preso político”, advirtió el exmandatario.
La legislación brasileña establece que los condenados por un tribunal colegiado tienen que comenzar a cumplir la sentencia cuando ya no tengan posibilidad de recursos ante la segunda instancia, como en el actual caso del exmandatario.
En caso de que el Tribunal de Porto Alegre rechace el lunes el recurso interpuesto por Lula contra su condena y si la Corte Suprema no acepta el habeas corpus, el juez federal Sergio Moro podrá ordenar el encarcelamiento de Lula la próxima semana.
Lula fue hallado culpable de recibir 2,25 millones de reales (unos 700.000 dólares) por sobornos de parte de la constructora OAS, los cuales se habrían materializado en la reserva y reforma de un apartamento tríplex en el balneario de Guarujá, en el litoral del estado de São Paulo.
El STF aprobó en 2016, por 6 votos a 5, la posibilidad de que las sentencias de detención empiecen a cumplirse al agotarse los recursos de segunda instancia. Hasta entonces, si no existía riesgo de fuga u otros motivos para encarcelarlo, un condenado podía recurrir en libertad hasta que su caso transitara por el Supremo Tribunal de Justicia (STJ, tercera instancia) y, eventualmente, ante el propio STF.
Pero varios magistrados de la Corte quieren rediscutir el asunto, en nombre de la “presunción de inocencia”. En caso de que el STF cambie de parecer, también podrían verse beneficiados numerosos expoderosos empresarios y políticos condenados en el marco de la Operación Lava Jato, una investigación gigantesca que partió de un esquema de corrupción centrado en Petrobras.