Entre papeles y discursos
MÁS DE 47.000 MENORES EN CRIADAZGO MUCHAS LEYES, POCAS ACCIONES
Niños en situación de adicción, de abandono, sometidos a explotación laboral, sexual, maltratados, golpeados, privados de sus derechos a vivir en ambiente saludable, a ser asistidos en su salud, de estudiar, entre otros, son muchas las situaciones de vulnerabilidad que pueden afectar a un niño.
Toda persona que tenga conocimiento de cualquiera de estas situaciones, está obligada a denunciar.
Ante un niño en situación de vulnerabilidad se presentan dos situaciones, que las expondremos como expectativa y realidad.
Tras las diligencias iniciales de rigor se da intervención a la defensoría de la Niñez, al juzgado de la Niñez y/o al Ministerio Público, según cada caso, y estos tomarán medidas inmediatas para el esclarecimiento del caso, sanción a eventuales responsables de la violación de derechos y protección al niño.
Pero en realidad lo que ocurre en la práctica es algo diferente. Veamos: si su llamada al Fonoayuda es atendida, Ud. no debe tener muchas expectativas acerca de lo de la familia y se llevaron la niña a la fuerza. La dueña de casa llamó al 147 varias veces, pero no fue atendida.
El caso fue informado a la Fiscalía, que ya tenía otra denuncia por abuso a la misma niña pero por otra persona, de noviembre del 2017. Al igual que el nuevo caso, prácticamente estaba en foja cero.
La fiscala dijo necesitar la evaluación psicológica a la niña antes de tomar cualquier medida, pero como hay una sola psicóloga para toda la zona, dicho estudio podría demorar dos a tres meses, como efectivamente ocurrió. Mientras tanto, ninguno de los supuestos abusadores contaba con restricción alguna que le impidiera acceder a la niña, que quedó a cargo de otra persona, en las cercanías del lugar de residencia de los sospechosos.
La falta de sintonía entre los tiempos de la niñez y el de las autoridades es uno de las principales fallas del sistema.