Iglesia insta a elegir y optar por quienes priorizan el bien común
Se recordó ayer la pasión y muerte de Cristo. Hoy se espera el anuncio de la resurrección. En estos días santos el arzobispo Edmundo Valenzuela pidió participación en las próximas elecciones y optar por el bien común. El sacerdote Guillermo Acero exhortó
En la Catedral Metropolitana se realizó la conmemoración de la pasión y muerte de Cristo. Más de 400 fieles participaron de la celebración. El sacerdote colombiano Guillermo Acero, quien dio la homilía, indicó que los católicos no deben olvidar que el modelo a seguir es Jesús. “Nos mostró el acto de amor más grande y pese a que estamos en medio de la diversidad y la incomprensión, nosotros debemos ser como Él, sacrificarnos por quienes sea necesario”, señaló.
El Jueves Santo, el arzobispo Valenzuela se refirió a la realidad nacional y en la misa crismal destacó el momento histórico que va a celebrar el país el próximo domingo 22 de abril, cuando los electores elijan a las nuevas autoridades. Invitó a tener en cuenta el último mensaje de los obispos para la ocasión. “A partir del sentido evangélico de la autoridad como servicio, nos dirigimos a quienes serán electos recordándoles varios temas sociales que merecen solución; también a los electores, que hagan un discernimiento por quién o quiénes votar, según defiendan los valores de la vida, la familia, la dignidad de la persona humana y el bien común. Quienes son llamados al servicio de la autoridad cuidan del pueblo de Dios que se les encomienda, aman la Patria y la sirvan en la verdad, la justicia y los derechos humanos consagrados en la Constitución”, enfatizó.
En la celebración de la Ultima Cena se resaltó la instauración de la Eucaristía y al término del acto, el obispo resaltó también sobre la necesidad de que las autoridades respeten las leyes y la Carta Magna. “Si todos cumplimos las leyes, funcionará bien la nación. Pero las leyes parecen estar hechas para no ser cumplidas, o al menos solo las cumplen los tontos o los pobres”, dijo. Explicó que la liberación de la que habla el evangelio tiene que ver mucho con la liberación del pecado. ¿Qué es el pecado? Es aquello que nos destruye como personas, como familia y como país, y ya vemos el no funcionamiento de la Justicia, el no funcionamiento del orden constitucional, y el no cumplimiento de artículos de la Constitución, destacó.