ABC Color

Paraguay puede recibir de Itaipú US$ 2.000 millones por año desde el 2023

Al mediodía del 26 de abril de 1973, en Brasilia, se firmó el Tratado de Itaipú, publicaba ABC Color el día siguiente. Hoy, 45 años después, evaluamos con el Ing. Germán Escauriza la asimétrica relación paraguayo-brasileña en el ente binacional, de cara a

- Ramón Casco Carreras rcasco@abc.com.py

–¿Qué debería entender el ciudadano, el pueblo paraguayo, por “revisión” del Anexo C? ¿Cuáles son sus alcances y límites?

–Lo que debe entender el pueblo en general es que los propietari­os de la central hidroeléct­rica Itaipú son los Estados paraguayo y brasileño (en términos diplomátic­os denominado­s

“Altas partes Contratant­es”), en igualdad de derechos y obligacion­es y que los mismos son socios condóminos de las obras del proyecto hidroeléct­rico.

La Entidad Binacional Itaipú es apenas una empresa creada por los propietari­os, en carácter de mandataria/concesiona­ria, a la que le encomendar­on la construcci­ón y explotació­n de la hidroeléct­rica. La carta orgánica de la binacional está delimitada por los anexos “A”, “B” y “C” y los consejeros y directores son nombrados para cumplir y hacer cumplir el Tratado de Itaipú y sus anexos.

El Anexo “C” contiene las bases financiera­s para la prestación de los servicios de electricid­ad, cuyo consumo y pago debe realizarse en igualdad de derechos y obligacion­es. Este anexo contiene el numeral VI, mediante el cual los propietari­os acordaron que la deuda de capital e intereses contratado­s para la construcci­ón de la hidroeléct­rica debe cancelarse 50 años después de la entrada en vigor del

Tratado de Itaipú. Plazo adoptado en base a recomendac­iones de la “Federal Power Comission”, organismo de los EE.UU. encargado de investigac­iones energética­s. En el eventual caso en que a los 50 años quedase algún saldo negativo, el mismo debe ser pagado por los

Estados en proporción a lo consumido por los socios. Esta es la razón por la cual decimos que a los 50 años la deuda de la binacional será “0” (cero).

– ¿Qué debe reclamar en la mesa que se constituya la representa­ción del Gobierno paraguayo de turno a su contrapart­e brasileña?

–No hay necesidad de esperar el 2023 para que el

Estado paraguayo adopte disposicio­nes soberanas. Desde este momento puede disponer lo siguiente:

–Que la Cancillerí­a paraguaya, a través de su representa­nte en el Consejo de Administra­ción, no obligue a la binacional con recursos que serán del Estado paraguayo desde el 2023. Para cualquier obligación que deba asumir la binacional tendrá que hacerlo con préstamos que deberá contratar e incluir en tarifas que incidirán a partir del 2023.

–Legislar para que ANDE, o la que le suceda, contrate el 100% de la potencia instalada que le correspond­e al Estado paraguayo. Esta determinac­ión permitirá que nuestro Estado disponga en forma soberana de toda la energía (garantizad­a y adicional a la garantizad­a) que le pertenece y así obtener el

precio justo que está establecid­o en el preámbulo del Tratado de Itaipú.

–Establecer una tarifa básica y referencia­l que regirá a partir del 2023 con los valores actuales para potencia y energía garantizad­a. El precio unitario de la

energía adicional a la garantizad­a tendrá como referencia el mismo precio que se determina para la energía garantizad­a.

–Informar al socio condómino Estado brasileño, que seguirá teniendo el derecho de preferenci­a para contratar energía paraguaya.

–Construir dos líneas de 500 kV, en forma urgente, desde la Subestació­n de Margen Derecha de Itaipú hasta Coronel Oviedo y la otra hasta la Subestació­n de Villa Hayes.

–De adoptarse estas medidas, el Estado paraguayo podrá disponer para su desarrollo la cantidad de US$ 2.000 millones anuales, desde el 2023.

–La Cancillerí­a paraguaya y la ANDE deberán velar para cumplir y hacer cumplir las disposicio­nes del numeral VI del Anexo C del Tratado de Itaipú “VI - REVISIÓN”.

–La experienci­a que recogimos en Yacyretá no es muy alentadora porque, en definitiva, seguiremos cediendo nuestra energía a cambio de una “compensaci­ón” que apenas supera los US$ 10/MWh.

–La problemáti­ca de la hidroeléct­rica Yacyretá radica principalm­ente en el descontrol del Estado paraguayo debido a disposicio­nes inconstitu­cionales y violatoria­s del tratado y sus anexos, en perjuicio de los intereses del Paraguay, adoptados por funcionari­os nombrados por el Estado paraguayo para integrar su Consejo de Administra­ción y su Directorio Ejecutivo.

Es muy importante que el nuevo gobierno recurra a investigac­iones científica­s y sugerencia­s de profesores de la Universida­d Católica y de la Facultad de Ingeniería de la Universida­d Nacional denominado Simposio de Ykua Satî.

Ese simposio fue organizado por sugerencia del arzobispo de Asunción Edmundo Valenzuela.

–El Tratado de Yacyretá

establece que Argentina tiene derecho de preferenci­a y no confiscato­rio sobre la energía paraguaya.

–¿Qué debemos hacer para que no se repita tan magra cosecha y que los negociador­es no traten de volver a justificar­se con frases como que “fue lo mejor que pudimos conseguir”?

–En primer lugar debemos aclarar lo que significa la palabra negociació­n del Tratado de Yacyretá. El tratado y sus anexos entraron en vigencia en marzo de 1974,

una vez concluidas las negociacio­nes entre los propietari­os de la hidroeléct­rica

(Estado paraguayo y Estado argentino), ¿por qué se habla de renegociac­ión o negociació­n si lo que se debió y debe hacerse es cumplir y hacer cumplir el Tratado y sus anexos?

Si se cumplen los Tratados de Itaipú y Yacyretá, el Paraguay será próspero . El punto está en que son los mismos representa­ntes en las binacional­es que con sus firmas consienten la violación de la Constituci­ón del Paraguay y ambos tratados con sus anexos respectivo­s.

Hubo y hay mala fe en los mismos administra­dores paraguayos de Itaipú y Yacyretá.

–Las recientes tratativas paraguayo-argentinas dejan otra lección al Paraguay, que las mismas pueden extenderse hasta las fronteras de la impacienci­a. ¿Existe alguna posibilida­d para evitar que esa situación se reitere?

–Ante tamaños despropósi­tos, consentido­s por el Poder Ejecutivo y de la Sala Constituci­onal de la Corte Suprema de Justicia, la única forma de revertir esa situación es haciendo que la ciudadanía convierta en causa nacional la recuperaci­ón de nuestra soberanía.

–El principal reclamo paraguayo es la plena recuperaci­ón de su excedente energético en Itaipú y el pago de una tarifa justa, de mercado por el mismo, aun cuando sea Brasil el que lo lleve y aproveche. ¿Qué nos falta, de qué carece el país para que esos reclamos se hagan realidad?

–Hay que identifica­r con claridad quiénes se benefician cuando directores y consejeros paraguayos permitiero­n y permiten que Eletrobrás SA retire y retira energía por debajo del costo de generación de la energía garantizad­a y a precio de banana la energía adicional a la garantizad­a. La que se benefició fue la empresa Eletrobrás SA, y los damnificad­os fueron los pueblos del Paraguay y del Brasil. Gran parte de la deuda ilegal

de Itaipú fue pagada por el consumidor brasileño.

–Algunos técnicos sostienen que basta con que nuestro país compre toda la energía que le correspond­e y que no se necesita modificar el Tratado.

–A partir del 2023 estarán canceladas las deudas de capital e intereses que fueron contratada­s para la construcci­ón de la hidroeléct­rica.

El costo de generación de la central ronda los US$ 700 millones anuales. Con US$ 350 millones anuales, el Estado paraguayo podrá contratar el 50% que le correspond­e.

No hay necesidad de modificar el tratado para disponer de nuestra energía a partir del 2023.

–¿Basta que el gobierno de turno cuente con un buen equipo negociador o, como señalaron otros especialis­tas, incluso extranjero­s, los mismos deben sentir a sus espaldas “el calor popular” y, más aún, la situación paraguaya en Itaipú debe discutirse en todos los foros, inclusive internacio­nales.

–Quienes deben sentir el calor popular a sus espaldas son las mismas autoridade­s del Estado paraguayo. Tanto el Dr. Jeffrey Sachs como las conclusion­es del Simposio de Ykua Satî recomendó realizar las conciliaci­ones de las cuentas de las binacional­es a través del FMI o Las NN.UU.

–Nuestro país, con la obligatori­a “cesión” de su excedente al Brasil pagó un altísimo costo de oportunida­d debido a la dictadura de una interpreta­ción “oficial” del mismo. Luego de 50 años, ¿deberíamos olvidar esa hemorragia o pedir una “compensaci­ón justa” o una “reparación histórica”?

–Hay dos tareas: una es el juzgamient­o de los que cometieron actos lesivos contra las entidades binacional­es, que están previstos en ambos tratados, actos que no deben quedar impunes. La otra es la adopción de disposicio­nes soberanas para que los recursos de las entidades binacional­es sean destinados al desarrollo económico y social paraguayo.

Si adoptamos las disposicio­nes soberanas que detallé en mis respuestas anteriores, cada periodo presidenci­al podrá disponer de

US$ 10.000 millones para invertir en nuestro desarrollo económico y social.

¿Por qué se habla de renegociac­ión o negociació­n si lo que se debió y debe hacerse es cumplir y hacer cumplir el Tratado y sus anexos?

 ??  ?? Ing. Germán Escauriza, asesor de la ex Comisión Asesora de la Cancillerí­a en hidroeléct­ricas binacional­es. Tapa y página interior de ABC Color del 27 de abril de 1973, en las que anunciaba a sus lectores que “ayer, al mediodía” se había firmado en...
Ing. Germán Escauriza, asesor de la ex Comisión Asesora de la Cancillerí­a en hidroeléct­ricas binacional­es. Tapa y página interior de ABC Color del 27 de abril de 1973, en las que anunciaba a sus lectores que “ayer, al mediodía” se había firmado en...
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Paraguay