Liderazgo a prueba
Mientras los senadores de Colorado Añetete votaron por aumentar significativamente el impuesto al tabaco la semana anterior, los diputados de Colorado Añetete lo redujeron nuevamente en la semana que termina, en medio de la opinión del futuro ministro de Salud, de que debería aumentarse al máximo posible el tributo.
Así teníamos por ejemplo al diputado J. J. Ríos, quien aspira a ser ministro del próximo gobierno por el compromiso que dice que Mario Abdo asumió con él, apoyando el rechazo del proyecto presentado por senadores de su propio movimiento.
Nos hubiésemos sentido tentados a volver a decir que Kafka hubiese sido apenas un costumbrista en nuestro país, o que teníamos a una especie de Dr. Jekyll y Mr. Hyde político, si no fuese porque esta fue una conducta colectiva que solo puede explicarse, o desde un doble discurso, o desde una falta de liderazgo para trabajar proyectos de ley.
Cualquiera de los casos es inquietante. O porque se dice una cosa en público y se hace otra bajo la mesa, o porque no existe la capacidad de llevar adelante una posición institucional, firme y previsible.
No es el primer caso. Así tenemos por ejemplo la indefinición y las contradicciones del futuro presidente Mario Abdo sobre la aceptación de la renuncia que debe presentar el presidente Cartes para intentar jurar como senador.
Abdo había defendido la idea de que tanto Cartes como Duarte no pueden ser senadores porque con su candidatura violaban la Constitución.
Pero Abdo hizo campaña política desde diciembre hasta abril avalando y legitimando ambas candidaturas, con discursos y compartiendo escenario y spots de propaganda.
Alguno podrá decir que eso fue respetando lo que la Corte decidió, permitiendo ambas candidaturas, por mantener una conducta de respeto institucional.
Pero es la misma Corte contra la que sí se rebeló, cuando esta avaló el intento de enmienda para la reelección.
Por allí ya salió el ministro de Agricultura Gneiting a pedirle “mano dura” y liderazgo para cumplir los acuerdos y permitir que la renuncia de Cartes se acepte y este pueda jurar como senador.
Mario Abdo tiene que decidir, ya que el tiempo se le está agotando. Por ahora gana margen de maniobra argumentando que su movimiento es un movimiento que debate y que el tema se discutirá en la bancada del Senado, que es donde existen especulaciones sobre si hay o no votos suficientes para aceptar la renuncia del Presidente.
Abdo tiene que decidir con quién construirá gobierno en esta su primera etapa de gestión. Un viejo zorro de la política como el expresidente Duarte Frutos ya le advirtió el viernes que si quiere gobernabilidad debe permitir el juramento de Cartes.