Religiosos rechazan que Cartes sea senador activo
La Orden de Predicadores Frailes Dominicos del Paraguay expresó en un comunicado su rechazo a la trans- gresión del artículo 189 de la Carta Magna, que establece claramente que los expresidentes solo podrán ser se- nadores vitalicios (no integrarán el quorum, tendrán voz pero no voto), y por ende expresa estar en contra de la renuncia de Horacio Cartes a la Presidencia, lo que le permitiría erigirse como legislador activo. Similar postura a la citada emitieron los miembros del Comité de Iglesias para Ayudas de Emergencia (Cipae).
Los frailes dominicos agregan que la eventual aceptación de la renuncia de Cartes para encaminarse a ser senador activo “es una violación de la Constitución Nacional con fines particulares y partidarios”.
Refieren además que repudian “el actuar de todas las asociaciones par- tidarias e instituciones (Corte Suprema de Justicia) que han permitido que este hecho tenga lugar”.
Los frailes dominicos expresan que “este atropello afecta directamente a todos los ciudadanos, ya que fragmenta aún más el débil ambiente político”.
Ante aquel escenario, la agrupación religiosa insta a senadores y diputados “a negarse a la renuncia del presidente Horacio Cartes” y a velar por el cumplimiento de la Carta Magna.
Recuerdan a los ciudadanos que deben “manifestarse de todas las formas posibles en contra de este atropello”, tal como lo indica el artículo 138 de la Constitución. También hacen un llamado a las demás instituciones cristianas a que “reflexionen y se manifiesten” ante las “tristezas y las angustias de nuestro pueblo”.
Finalizan su manifiesto recordando a la hermana carmelita descalza María Felicia Guggiari, conocida como Chiquitunga, que será beatificada el 23 de junio, con una frase que se le atribuye: “Estoy haciendo lo posible por influir, en lo que más pueda, porque nuestros principios, los de Jesús, se introduzcan donde quiera que fuere”.
Por su parte, los miembros del Comité de Iglesias para Ayudas de Emergencia exhortan al pueblo paraguayo a “expresar su indignación ante los reiterados atropellos a la Carta Magna”.
Rogaron porque los parlamentarios y ciudadanos no se dejen engañar “por la astuta serpiente, que busca convencer con falacia la aceptación de la renuncia de Horacio Cartes”. “Digamos no a la fruta envenenada, no a la flagrante y escandalosa violación de la Constitución Nacional”, señalaron.