Allanan casa de implicados en amenaza a periodista
El fiscal de Capiibary Rusbell Benítez López allanó dos viviendas pertenecientes a Optaciano Vázquez, alias Pi’i, y Elvio Medina, respectivamente, en el marco de la investigación sobre los audios filtrados en los que se escuchan amenazas contra el corresp
El fiscal Rusbell Benítez López explicó que en la primera vivienda a la que llegaron fue a la de Vázquez, pero que el mismo no estaba porque fue de viaje, según informó la esposa.
Posteriormente, la comitiva fiscal policial se trasladó hasta la casa del fotógrafo Elvio Medina, quien sí estaba presente.
Durante el operativo, fue requisado el teléfono celular del señalado, a fin de buscar más audios y verificar si existen otras personas en el grupo de Whatsapp donde fueron lanzadas las amenazas contra el comunicador. No descartan realizar más imputaciones.
El agentes fiscal dijo que se presentaron en la víspera ante el Ministerio Público Vázquez, después de retornar de su viaje a Salto del Guairá, así como Medina y una tercera persona de apellido Encina. Hasta el momento, no hay personas detenidas en el marco de la causa investigada.
“No necesitamos pensar en la vida de estos, a estos hay que agarrarlos en el camino y cortarles la oreja de una y tirársela a los perros, así cada vez que se toque va a recordar por qué se quedó sin oreja”, decía una de las amenazas.
Corresponsal declaró
El corresponsal de este diario Alberto Núñez Barreto declaró el martes al mediodía ante el fiscal de Capiibary, Rusbell Benítez, López, en el marco de la denuncia presentada ante la unidad por la amenaza que recibió a través de mensajes de audio por Whatsapp.
Núñez entregó a los investigadores todos los datos relacionados a los audios, a los cuales él mismo pudo acceder, y que fueron presentados como evidencia en la denuncia planteada ante la Comisaría 17ª de Capiibary, tras la filtración de los audios que se dieron por la “molestia” que generaba su tarea periodística.
Lo que causó enojo fue una nota sobre el tráfico de mandioca al Brasil desde la fronteriza ciudad de Pindoty Porã.
Aunque el artículo no fue elaborado por el corresponsal, los investigados, apuntaron directamente al comunicador y lo responsabilizaron. Todos estos hechos constan en los audios compartidos en el grupo de mensajería y que fueron entregados como evidencia al Ministerio Público.