El Gobierno ya se olvidó de Edelio
Unas 500 personas participaron ayer de la marcha realizada en Arroyito, al cumplirse cuatro años del secuestro del suboficial Edelio Morínigo. Pidieron saber sobre su paradero.
Al cumplirse ayer cuatro años del secuestro del suboficial de Policía Edelio Morínigo, gran cantidad de personas marchó en Arroyito, Concepción, para recordarle al Gobierno que tanto el uniformado como el ganadero Félix Urbieta siguen en poder del grupo criminal EPP. Una vez más claman a las autoridades que se ocupen del Norte.
ARROYITO, departamento de Concepción (Aldo Rojas Cardozo, corresponsal y Omar Acosta, enviado especial). Poco antes de las 14:00 se aglutinaron frente al Batallón de Ingeniería Nº 3 “Cnel. Félix Cabrera”, en el kilómetro 79 de la Ruta V “Gral. Bernardino Caballero”, familiares, amigos, vecinos y hasta personas que no conocían a Edelio Morínigo Florenciano. A las 14:30 se inició la caminata, donde los pobladores se sumaron entonando canciones patrióticas y religiosas.
Una parada se realizó en la Calle 18, donde se colocó un cartel con las imágenes de Edelio y de Félix Urbieta Ramírez, con un pedido de libertad para ambos, en la parte posterior. Allí, Obdulia Florenciano, madre de Edelio, agradeció a los que asistieron y pidió el fin de los secuestros, así como información sobre el paradero de su hijo.
Elisa Mabel Ledesma, esposa del policía, también habló ante la concurrencia y a los secuestradores solicitando saber sobre su marido. “Imploramos información, son cuatro años y esto es demasiado. Queremos una prueba de vida y me pregunto ¿por qué tanto silencio de la gente del EPP sobre Edelio?”, dijo.
Kilómetros de dolor
La multitud caminó cerca de cuatro kilómetros hasta llegar a la parroquia María Auxiliadora, para la misa que fue presidida por el padre Domingo Ovelar y los sacerdotes José Zavala y Cristian Paiva. En la homilía, el padre Zavala, de Arroyito, recalcó que viven en zozobra y aseguró que las autoridades no tienen interés en que esto termine, refiriéndose al EPP.
Por su parte, el padre Paiva, de Santa Rosa del Aguaray, pidió a las nuevas autoridades de Concepción y San Pedro que busquen reunirse con la ciudadanía para conocer la realidad y las verdaderas necesidades.
“Varios gobiernos han postergado al Norte y la pobreza es la fuente de violencia en nuestro país”, aseveró.
En tanto el padre Ovelar pidió a la ciudadanía que ayude a la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) con ideas y con acompañamiento.
Posterior a la misa, se realizó un festival denominado “Por la Paz en el Norte”, en el patio de la parroquia, como culminación de la iniciativa.
Participaron de la marcha los diputados Luis Urbieta (ANR), los liberales Emilio Pavón y Andrés Rojas, además del gobernador electo Édgar López Ruiz (PLRA).