Preocupan etiquetados uruguayos
La decisión uruguaya de cambio del etiquetado frontal de alimentos a fin de disuadir de la ingesta de ciertos productos genera preocupación a la industria paraguaya. Representantes locales estudiarán una posición conjunta ante el Parlamento del Mercosur, según se informó.
En la sesión de la semana pasada, el Parlamento del Mercosur por Paraguay recibió al exdiputado Sebastián Acha, quien es asesor de industriales paraguayos. Este solicitó el apoyo de los representantes paraguayos para llevar una postura ante el plenario de Montevideo, en Uruguay, ante la decisión del Ejecutivo uruguayo, liderado por Tavaré Vázquez, que a través de un decreto plantea un etiquetado distinto a lo que indican las normas del Mercosur, basadas en un Codex Alimentarium, dispuesto por la FAO (Food and Agriculture Organization, dependiente de la ONU).
Acha manifestó que es preocupante que Uruguay haya tomado una medida unilateral, a partir de experimentos no comprobados, ocurridos en México y Ecuador. Añadió que las nuevas precintas deberán ir en productos elaborados o que contengan grasas, grasas saturadas, sodio y azúcares.
Añadió que ninguna empresa, industria o comercializadora está en desacuerdo en contar con el rotulado, pero que la disconformidad radica en que no sea respetada una norma común, como se venía haciendo y que, en vez de una ley, se disponga por medio de un decreto.
El problema tiene relación con la obesidad, pero es parte de un “fenómeno monocausal, que es la ingesta de alimentos, por lo que es una visión parcial” y acotó que no se consideran otros hechos, como que en los programas de enseñanza solo se incluyan dos horas de educación física.
En casos como los europeos, en realidad este tipo de tendencias tiene que ver con la promoción de productos de su propio mercado, como el denominado “slow food”, vinculado a alimentos dietéticos, que inclusive son más costosos para el consumidor. “Hay una satanización de los productos ultraprocesados”, prosiguió.
Afirmó que no se trata de una cuestión meramente formal, sino también política y que se busca encarecer la cadena de producción y disuadir de comer alimentos que no son del todo malos. “Podemos llegar a un acuerdo de rotulado, pero no lo que la gente tiene que comer”, recalcó.
En la ocasión, Nelson Argaña condujo la sesión e intervinieron María Eugenia Crichigno, Manuel Morínigo, Enzo Cardozo y otros. Decidieron que el próximo jueves se reunirán para analizar la propuesta técnica de Sebastián Acha.
Se buscará llevar ante la plenaria una posición única de Paraguay, de tal modo a, si fuera el caso, denunciar la práctica propuesta por parte del Gobierno de Uruguay.