Ministro de Hacienda, ambiguo sobre plan de subir impuestos
El ministro de Hacienda, Benigno López, es partidario de hablar de una reforma tributaria de manera integral y no de modificar los impuestos de a uno, como se pretende realizar actualmente en el Congreso afectando a la soja, las bebidas alcohólicas y gaseosas, así como al tabaco.
El secretario de Estado anunció ayer que están analizando a nivel técnico las propuestas que se barajan en el Legislativo y el próximo lunes tendrán una posición definida sobre las modificaciones impositivas planteadas.
López dijo, sin embargo, que en principio considera que se debe mirar la economía en su conjunto y hablar de una reforma tributaria de manera integral, para después ver qué sector va a tener un mayor peso.
“Así de a uno no creo que sea conveniente”, expresó el ministro de Hacienda cuando se le consultó sobre los planes que se están impulsando en la Cámara de Senadores en cuanto al impuesto a la soja, bebidas y tabaco.
El ministro sostuvo que a la par de esto, la otra cara de la misma moneda que se debe tener en cuenta es la revisión del gasto público, tarea que la comisión conformada con el sector privado empezará el próximo jueves.
López sostiene que con estos elementos el objetivo debe apuntar, por un lado, a mejorar el gasto del Estado y, por el otro, determinar el espacio que se tiene en la matriz tributaria para tocar los impuestos.
En el Senado se propone aumentar el impuesto al tabaco, a las bebidas alcohólicas y gaseosas, así como a la exportación de soja, de tal manera a destinar los fondos a sectores sociales, principalmente salud pública.
En lo que respecta al impuesto al tabaco, actualmente tiene una tasa máxima de 22%, pero se aplica 18% para la comercialización de los diferentes tipos. De acuerdo con la propuesta barajada, se establecería una tasa mínima del 30% y una máxima del 40, quedando a criterio del Ejecutivo establecer el nivel dentro de este margen, como sucede actualmente.
Sobre las bebidas alcohólicas y gaseosas, no se definieron aún las tasas a las cuales se pretende llevar, pero actualmente van de un 5% para gaseosas, 9% para cervezas, 11% para coñac, licores, sidras, vinos, whisky y otros; en tanto 13% para champán y equivalentes.
Con respecto a la exportación de soja, es una intención que se viene repitiendo desde 2005 luego de quedar derogada el gravamen a la exportación con la vigencia de la Ley de Adecuación Fiscal. Ahora, el proyecto apunta a establecer una tasa del 15%.
En 2013 el Congreso sancionó un proyecto de ley que establecía una tasa del 10% a la exportación de granos en estado natural (soja, trigo, maíz y girasol), pero fue vetado por el entonces presidente de la República, Horacio Cartes.