Servicio sanitario público que enluta
Una mujer que sufrió desprendimiento de placenta permaneció más de 15 horas con su bebé muerto en el vientre al no encontrar la atención que requería en el Hospital Regional de Fuerte Olimpo. A consecuencia de eso sufrió una infección y le extrajeron el ú
18-05: FUERTE OLIMPO, departamento Alto Paraguay (Carlos Almirón, corresponsal). Un terrible calvario vivió Margarita Millán (32), que se encontraba en su séptimo mes de embarazo y debido a la precariedad del sistema de salud pública de esta ciudad perdió a su primer hijo y también la posibilidad de concebir.
Wilson Aquino, pareja de Margarita, dijo que el pasado 15 de mayo (Día de la Madre) la paciente sintió molestias, por lo que inmediatamente concurrieron al Hospital Regional de esta ciudad. En el nosocomio la obstetra detectó desprendimiento de placenta y que la criatura ya se encontraba sin signos de vida.
La mujer debía entrar inmediatamente en cirugía para la extracción del bebé muerto, pero la intervención no podían realizar en el local asistencial debido a que el único médico anestesista que trabaja en la zona se encontraba de vacaciones.
Odisea
Derivaron a la paciente al Hospital Regional de Pedro Juan Caballero, distante unos 400 kilómetros de esta localidad. Como siempre se hace en estos casos, la mujer fue trasladada en una deslizadora unos 60 kilómetros hasta la ciudad brasileña de Puerto Murtinho y allí abordó una ambulancia asignada a la XVII Región Sanitaria que la llevó a la capital del Amambay.
Sin embargo, debido a los diferentes contratiempos como un temporal que se registró y la oscuridad de la noche, porque partieron de la Fuerte Olimpo a las 21:30, hicieron que se tarde unas 15 horas para llegar al centro asistencial.
Por las largas horas transcurridas con el niño muerto en el vientre, los médicos no tuvieron más opción que vaciarle por completo el útero. Físicamente mi señora está estable, pero sicológicamente está destrozada”, señaló Aquino.