Panorama triste en escuelas públicas
Faltan apenas diez días para el comienzo de las clases en las instituciones educativas del Estado y muchas de ellas continúan en lamentable situación, pese al presupuesto asignado. En tanto, en la escuela Sagrado Corazón de Jesús de Villarrica, mediante la autogestión construyen poco a poco un aula porque los organismos oficiales se rehusan a ayudar debido a que la institución está asentada en un terreno privado y no procuran una solución definitiva (foto).
En aulas viejas, en precarias condiciones, alumnos de la Escuela Básica N° 1.090 “Sagrado Corazón de Jesús” del barrio Estación de la ciudad de Villarrica, iniciarán las clases el jueves 21 de febrero. El local tiene más de 50 años y el Estado nunca invirtió en su mantenimiento por estar en un terreno privado.
VILLARRICA (Carlos Ávalos, corresponsal). Más de 150 alumnos estudian, desde prejardín hasta el sexto grado, en la Escuela Sagrado Corazón de Jesús, del popular barrio Estación de la capital del departamento del Guairá. La institución funciona desde hace más de 50 años en propiedad privada, en una casona, cuya edificación tiene más de 70 años y con el tiempo fue adecuada para una escuela.
Los alumnos estudian en los turnos mañana y tarde, y son atendidos por 20 docentes que tienen rubros del Estado. La institución es reconocida por albergar a niños procedentes de familias de escasos recursos económicos y de extrema pobreza, que una vez más comenzarán el año lectivo en viejas y precarias salas de clase.
La escuela no puede ser beneficiada con mejoras de infraestructura por parte del Estado porque está asentada dentro de una propiedad privada, de la familia Mussi, tradicional de Villarrica.
La directora de la escuela, profesora Pura Cuyer, comentó que desde hace varios años realizan diversos tipos de actividades, como polladas, rifas, entre otros, para poder mantener la institución. Señaló que mediante autogestión están por culminar la construcción de una segunda sala.
Hace tres años de forma consecutiva golpea las puertas de la Municipalidad de Villarrica, la Gobernación de Guairá y el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) para pedir ayuda, pero dijo que lamentablemente no logró el objetivo.
“La excusa siempre es que no tenemos el título de propiedad”, dijo. Comentó que ya recurrió a otras fuentes, como órganos de ayudas sociales y otros tantos, pero que igualmente son ignorados.
Indicó que en varias ocasiones se reunió con la familia Mussi, propietaria del inmueble, para concretar la donación a favor del MEC a fin de que la escuela pueda recibir los beneficios de entidades del Estado, pero que siempre reciben promesas que nunca son cumplidas. Solicitó que el ministro de Educación, Eduardo Petta, intervenga y converse con los dueños del terreno en cuestión para documentar la donación o que el MEC compre el predio.
La institución recibe la provisión de almuerzo, merienda y kits escolares, pero la infraestructura, que tiene fisuras en las paredes y goteras en el techo, no puede ser arreglada por el MEC, indicó. Además, la escuela carece de ventilación adecuada, así como de mobiliarios, como sillas con pupitres, escritorios y pizarras nuevas.