Cambian a los dos jefes policiales de Amambay
El director de Policía de Amambay y su segundo fueron cambiados ayer por el comandante, a raíz de los últimos escándalos y picos de violencia desatados en la frontera.
Los removidos son el comisario general Víctor Rivas, quien dejó de ser el director de Policía del departamento de Amambay, para pasar a ocupar el mismo cargo pero en el Alto Paraguay. El otro que se quedó sin cargo fue el comisario principal Teófilo Giménez, quien venía desempeñándose como jefe de Prevención y Seguridad de Amambay.
El nuevo titular de la Policía en Amambay es el comisario principal Ignacio Rodríguez y su segundo ahora es el comisario principal Silvio Cantero. El primero era director en Boquerón y Cantero fue por mucho tiempo jefe de la comisaría de San Lorenzo.
La gestión de Rivas y Giménez ya venía a los tumbos en las últimas semanas, a raíz de los sucesos de violencia que fueron incrementándose, especialmente los casos de sicariato.
Sin embargo, el elemento detonante del cambio fue el atentado que sufrió el miércoles último el suboficial principal Juan Alberto Cabañas Bogado, de 49 años, quien fue emboscado poco después de salir de su unidad, la subcomisaría 1ª de la colonia Fortuna Guazú, a 20 kilómetros de Pedro Juan Caballero.
Precisamente, con relación a este hecho, la Policía comunicó ayer la detención de dos jóvenes que fueron vistos el día del ataque vigilando la subcomisaría donde trabajaba Cabañas.
Aunque los muchachos niegan cualquier vínculo con el intento de homicidio, los investigadores creen que pudieron haber sido los campana que avisaron a los sicarios cuando el uniformado salía de su unidad.
Minotauro
A los comisarios destituidos ayer, Rivas y Giménez, también se les atribuye una negligencia en el sistema de resguardo de los cinco vehículos que estaban incautados pero que fueron devueltos a la red del capo brasileño apodado Minotauro.
Tres de los rodados reaparecieron el miércoles a la noche, como por “arte de magia”, Fueron hallados abandonados en la jurisdicción de Zanja Pytã, coincidentemente luego de que la Fiscalía imputara a seis policías de la oficina regional del departamento Control de Automotores que se habían comprometido a vigilar los vehículos.