Senad interceptó 21 líneas telefónicas en el caso Cucho
La Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) interceptó 21 líneas telefónicas durante el desarrollo del operativo Berilo, que consistió en la investigación de la red de narcotráfico internacional y lavado de dinero dirigida supuestamente por Reinaldo Javier Cabaña Santacruz, alias Cucho, quien en cinco días cumplirá 34 años de edad.
El dato fue confirmado en una declaración testifical por un agente especial analista de la Senad, quien participó directamente en la interceptación de las llamadas y las escuchas de las conversaciones del presunto jefe narco con sus principales cómplices.
Entre otras cosas, el antidrogas contó que la investigación contra Cucho Cabaña empezó en febrero del año pasado, a partir de informes de inteligencia, y que después se oficializó la pesquisa con la autorización que otorgó el 5 de abril de 2018 la jueza Lici Teresita Sánchez para que pudieran ser grabadas las comunicaciones de los miembros de la banda.
Primero fue pinchado el celular de Cucho, después el de su supuesto socio Hugo Martín Ríos, alias Yakaré, quien también está encarcelado ahora. Con el transcurso de las escuchas, fueron intervenidas también las líneas de los otros integrantes del entorno del líder de la organización.
El referido agente especial también confirmó que el diputado colorado Ulises Quintana intercedió para la liberación del dinero retenido por la Policía en Nueva Londres y con el cual después se compró una carga de cocaína, que al final cayó en Brasil. Ese envío fue monitoreado por la Senad hasta la frontera. Los 53 kilos de cocaína retenidos en Brasil tenían el sello de Rolex, marca distintiva supuestamente de Cucho Cabaña.
El celular de Ulises Quintana no fue espiado por tratarse de una autoridad nacional, dijo el agente a la Fiscalía.