Arrestan a otro expresidente de Brasil
El expresidente brasileño Michel Temer fue arrestado ayer, acusado de ser líder de un grupo que desvió en 40 años cerca de 1.800 millones de reales (unos 473,7 millones de dólares).
RÍO DE JANEIRO (EFE).
Temer se convierte así en el segundo expresidente de la era democrática del Brasil en pisar la prisión.
El otro es Lula da Silva, quien se encuentra ya condenado, a dos penas que suman 25 años, también por casos de corrupción.
Bajo el gobierno de Lula se montó el mayor esquema de corrupción en la historia de ese país, cuyas ramificaciones afectaron a toda la clase política brasileña.
“Identificamos
una organización criminal que viene actuando desde hace 40 años y que opera hasta hoy, liderada por Michel Temer, que desvía recursos públicos de entidades en las que el expresidente ha tenido influencia por los cargos que ha ejercido”, afirmó Fabiana Schneider, una de las fiscales responsables por la investigación.
De acuerdo con los cálculos de la fiscalía,
esta organización ha recibido en sobornos y promesas de sobornos unos 1.800 millones de reales desde entonces.
La fiscala explicó que la organización nació en 1980 cuando Temer inició su carrera
política como secretario de Seguridad Pública del estado de São Paulo y conoció al coronel de la Policía Militar João Baptista Lima Filho, su amigo desde entonces, quien ha actuado como “su operador financiero en los desvíos” e igualmente apresado ayer.
Agregó que entonces ambos
crearon la empresa llamada Argeplan, con la que se adjudicaban contratos públicos y desviaban los fondos.
El coordinador del equipo de investigadores de la Fiscalía, Eduardo El Hage, explicó que, pese a que la organización descubierta se involucró en corruptelas por 40 años,
la detención de Temer fue solicitada específicamente por un caso donde descubrió que el grupo se benefició de desvíos de Eletronuclear
, la estatal que opera las dos plantas nucleares del país.
El Hage aseguró que en la investigación quedó probado que
todos los presidentes de Eletronuclear desde 2005 fueron nombrados por recomendación de Temer y que a todos se les exigió que firmaran contratos para beneficiar Argeplan.