Abogado acusa a un juez de chicanero
El empresario brasileño de origen libanes Saad Ismail Ali Tarbine, de 35 años, acusado de ser el autor moral de fallido atentado contra el juez de Paz de Carayaó Pedro David Galeano Zelaya, de 34 años, lleva ocho meses internado en una clínica privada de Coronel Oviedo, supuestamente para evitar la cárcel. Esta situación fue denunciada semanas atrás por la víctima de aquel ataque.
Sin embargo, ahora el abogado defensor del sospechoso, Jorge Kronawetter, aseguró que las investigaciones del caso no pueden prosperar porque el juez Galeano ha chicaneado durante todo el proceso, al recusar a todos los jueces que han tomado el caso y luego a los miembros de la Cámara, por ello llegó a la Corte el expediente.
“Es por eso que no se ha podido estudiar la revisión de medidas que hemos planteado para nuestro defendido, que esta con un régimen de prisión en el hospital”, explico el profesional.
En la noche del sábado 14 de julio del 2018, el juez Galeano llegaba a su casa junto con su padre, a bordo de un automóvil, pero cuando estacionó el vehículo en el patio ambos fueron atacados por el desconocido, quien portaba una pistola. Sin embargo, el sicario perdió tiempo y no pudo dar en el blanco en los dos primeros disparos, esto fue aprovechado por el magistrado para reaccionar y eliminar al desconocido con un tiro en el pecho.
Tras las investigaciones, los agentes policiales descubrieron que el matón a sueldo había llegado dos días atrás a la ciudad de Coronel Oviedo, se hospedó en un hotel y su estadía fue pagada por Saad Ismail Ali Tarbine, quien incluso lo visitó la noche antes del fallido ataque.
Los agentes también lograron descubrir una supuesta vinculación sentimental entre la esposa de la víctima y el comerciante, lo que al final habría sido el motivo del intento de homicidio.
Ante esta situación, se ordenó la captura y la prisión preventiva del Ali Tarbine, pero este antes de que ir a la cárcel permanece internado en la clínica, señalaron.
El abogado Kronawetter confirmó que la persona que atacó a Galeano era empleado de su defendido y no era la primera vez que venía del Brasil para realizar trabajos de soldaduras en la firma, por ello es que el empresario pagó su estadía y solamente por esa vinculación la Fiscalía imputó a su cliente, precisó el profesional.
El defensor también negó que haya habido una relación sentimental entre la pareja de la víctima y su cliente, pero recalcó que el juez tiene denuncias de violencia doméstica y que este ha pedido dinero al empresario para retirar la denuncia en su contra y destrabar definitivamente la causa.